Tras conquistar con Fede quiere ser pirata el merecido Premio Ciudad de Málaga, Pablo Aranda rescata aquel entrañable personaje que soñaba con ser bucanero y disfrutaba jugando con las palabras para regalarnos una nueva entrega de sus descabelladas desventuras, ahora en la escuela primaria. Para evitar las caóticas caravanas que se organizan a la salida del colegio, se propone que cada padre apechugue en casa con el primer chaval que salga por la puerta con independencia de que este sea o no su hijo. Como es de imaginar, las situaciones más surrealistas se derivan de esta original medida por la que Fede descubrirá familias bien diferentes a la suya. Y para muestra del humor de nuestro protagonista escenas como la que explica el principio de Arquímedes en una taza de leche con galletas o comentarios del tipo "La noche pasó lenta… como un plato de lentejas".
Secciones
- Entreclásicos, por Rafael Narbona
- Stanislavblog, por Liz Perales
- En plan serie, por Enric Albero
- A la intemperie, por J. J. Armas Marcelo
- Homo Ludens, por Borja Vaz
- ÚItimo pase, por Alberto Ojeda
- Y tú que Io veas, por Elena Vozmediano
- iQué raro es todo!, por Álvaro Guibert
- Otras pantallas, por Carlos Reviriego
- El incomodador, por Juan Sardá
- Tengo una cita, por Manuel Hidalgo
Verticales