“La primera canción me atacó como un puma agazapado en un seto de azaleas”. Así, entre la urgencia y la poesía, se expresa Christina Rosenvinge en Debut, uno de los cancioneros que pueblan estos días nuestras librerías editados a mitad de camino entre las memorias, la narrativa y la recopilación. El formato, frecuente en los catálogos anglosajones, empieza a prodigarse en nuestro mercado gracias a una generación que encuentra en estos volúmenes una forma de reflexionar sobre lo que David Villanueva (prologuista de “¿Y si pongo otra palabra?”, de Antonio Vega) denomina “estados vibracionales”  y de consolidarlos a través de unas páginas que, fieles al estilo del viejo cancionero, vienen acompañadas en muchos casos de material inédito como en las Zozobras completas de Krahe y el mencionado trabajo del autor de “La chica de ayer”.  “En esta obra hay fuegos y llamas para la creación y la destrucción, para el calor y la luz, para el deseo y la consumación”, apunta Adam Cohen a la hora de presentar los poemas, las canciones y las notas personales inéditas de su padre Leonard que aparecen en La llama. “Ahora todo parece más oscuro, pero la llama no se ha apagado”, sentencia.

Además de los Beatles, Dylan, Patti Smith (con El mar de coral y “Augurios de inocencia añadidos por Lumen estos días)  y Pink Floyd  (con la historia de sus 179 canciones) se añaden ahora nuevas entregas de otros tantos compositores destinados a los degustadores del significado último de la obra completa, sintonizada a través de unas letras que, ahora sí, podemos percibirlas en toda su magnitud. “Prefiero el libro en el que solo aparecen las letras de sus canciones. A través de ellas es como creo haberlo conocido realmente”.  Krahe disparaba así, certero, como era habitual en él, sobre el legado de Brassens, tan presente en el trabajo de toda una recua de grandes letristas que ha tenido en Sabina su cabeza más visible. Los cancioneros que siguen a estas líneas -sin duda son todos los que están- demuestran que sus autores son algo más que intérpretes y que, con suerte, podrían entrar en el Olimpo que Dylan abrió en Estocolmo con sus estrofas de racimo. Nada más y nada menos.

Antonio Vega, el alquimista

Diez años sin uno de los compositores más influyentes de nuestra música. Canciones como Lucha de gigantes, El sitio de mi recreo, Mujer de cristal, No me iré mañana o Materia oscura aparecen ordenadas cronológicamente , desde la época de Vega en Nacha Pop (1980-1987) hasta su periplo en solitario iniciado en 1991, ya con álbumes como No me iré mañana, Océano de sol o Anatomía de una  ola. Los incondicionales del atormentado poeta madrileño podrán encontrar material inédito en Viento del desierto, Reloj del desierto, Abrazo inmortal y Antes de haber nacido, entre otras. Las colaboraciones con Santiago Auserón y Luz Casal (Deseo en silencio), Cómplices (Loco alquimista) y Antonio Flores (Luces de alcohol) culminan un volumen que se nos antoja imprescindible.

¿Y si pongo otra palabra? Antonio Vega. Demipage.



La palabra exacta de Rosenvinge

Prototipo del cancionero puesto al día. Un paso más hacia la compilación de temas que definen la carrera de un artista. Las ilustraciones y los textos firmados por la galardonada con el Premio Nacional de Músicas Actuales nos sitúan ante un auténtico objeto de coleccionista. Tal es la cuidada edición que exhiben sus páginas. Aquí están todos los temas de Christina Rosenvinge, desde Que me parta un rayo (1992) hasta Un hombre rubio (2018) pasando por hitos personales como Mi pequeño animal o Foreing Land. “Boris Vian decía estar más orgulloso de sus letras que de sus novelas. Esta afirmación puede extrañar a alguien que no haya intentado nunca escribir una letra pero yo comprendo perfectamente qué hay detrás”, escribe Rosenvinge en su coda final titulada "La palabra exacta". Un acierto en fondo y forma que conservaremos como oro en paño.

Debut. Christina Rosenvinge. Literatura Random House.

Las "ocurrencias" de Krahe

Si hay alguien del que conviene tener a mano las letras de sus canciones, ése es Javier Krahe. Inconformista, incorruptible y satírico, su huella en nuestra cultura de resistencia durará mucho tiempo. Más con este volumen al que acompaña un doble cd con el documental del homenaje que le hicieron amigos como el Gran Wyoming y Joaquín Sabina, que prologan además este trabajo con toda su producción. “Cualquiera de sus canciones, la que sea, la más tonta y liviana, está hecha con la maestría del que sabe”, sentencia Wyoming. Para el especialista en su obra Miguel Tomás-Valiente, “lo que da cohesión al corpus de Krahe, más aún que el tono, todavía más que el estilo, es la que también es su característica principal: la inteligencia, la brillantez de sus ocurrencias”. Así, nos encontraremos entre sus geografías el Valle de Lágrimas de su debut en 1980, La Mandrágora de un año después, el Corral de Cuernos (1985) y Elígeme (1988), entre otras, para cerrar con Las diez de últimas de 2013. Krahe se nos presenta más necesario que nunca.

Zozobras completas. Javier Krahe. 18 Chulos.

Brillo y melancolía de Anni B Sweet

"Escribir esta canción abrió una puerta en mi camino y, más adelante, me ha abierto los ojos".  Nunca estaremos lo suficientemente agradecidos a  Anni B Sweet por el timbre de una voz que ha cambiado nuestro panorama indie. Sus letras, en un inglés melancólico y aterciopelado, nos han acompañado en los momentos más ricos de nuestra existencia. Song of Pain, Doctor y Every One Talks son algunos de los temas que aparecen en este cancionero que lleva las evocadoras ilustraciones de Lucía Inthesky, sin las cuales estas páginas mandarían un mensaje menos enriquecedor. Enorme valor tienen también los textos introductorios que la cantautora malagueña realiza de cada una de sus piezas. La Constelación de Anni B Sweet, como ella misma dice, "evoca, emite, remite, transmite".

Constelaciones. Anni B Sweet. Kitsune Books

Divino Leonard Cohen

Echamos de menos al gran bardo canadiense pero su obra sigue viva en antologías como ésta que recoge poemas, canciones y notas personales inéditas del autor de Suzanne. Las creaciones aparecen ordenadas en esta "llama" incandescente producto de una de las mentes más privilegiadas de la música popular reciente. Además de los poemas, entre los que se incluye su Homenaje a Morente, nos encontramos con las letras de sus últimas cuatro entregas discográficas: Alerta Azul, Viejas ideas, Problemas populares y Lo quieres más oscuro. Como dice Alberto Manzano (traductor y amigo del poeta) en su biografía recientemente revisada y actualizada por Cúpula, quizá, en el último momento, "Cohen consiguiera firmar un tratado entre su amor y el amor divino".

La llama. Leonard Cohen. Salamandra.