El barítono norteamericano Thomas Hampson. Foto: Edison Classical Music Awards.

El barítono norteamericano Thomas Hampson rinde homenaje a Mahler con un nuevo disco y un concierto, este jueves, dentro de la temporada de Ibermúsica en el Auditorio Nacional de Madrid. Philippe Jordan lo acompañará al frente de la Joven Orquesta Mahler.

  • Canal Spotify de El Cultural: escuche la música de este artículo


  • Si le dejaran, Thomas Hampson (Indiana, EE UU, 1955) se entrevistaría a sí mismo. "Le advierto que tengo más preguntas que respuestas", arranca al teléfono el barítono estadounidense, que asegura padecer desde hace tiempo el síndrome Mahler. "Cuanto más sabes de él tanto más te queda por conocer. Sus partituras son una mina inagotable de sabiduría". Se refiere al cometido de su último disco mahleriano, Des Knaben Wunderhorn, junto a los músicos de Wiener Virtuosen, y al "sentido profundo" del concierto que este jueves ofrecerá en el Auditorio Nacional acompañando a Philippe Jordan y a la Joven Orquesta Mahler. La visita de esta nueva generación de virtuosos sirve de excusa a Hampson para ahondar en el legado de uno de sus músicos de referencia y dilucidar sobre el futuro a largo plazo de la música clásica. No tiene soluciones, pero sí algunas buenas propuestas. "El problema del público no es musical, sino sociológico. Debemos estudiar los fenómenos colectivos que llevan a la gente a una sala de concierto".



    Se le han juntado al cantante los aniversarios por la muerte y el nacimiento de Mahler. "El sentimiento es, desde luego, contradictorio. Uno debe celebrar el advenimiento de un genio, de una figura imprescindible de la música. Y, al mismo tiempo, no deja de sobrecoger la idea temprana de su muerte, incluso para la época en que vivió. Viendo lo que el nacimiento de Mahler desató, uno no puede dejar de preguntarse de qué nos privó su muerte".



    Suya es la primera edición crítica de Des Knaben Wunderhorn (El cuerno mágico de la juventud), que ha vuelto a grabar casi veinte años después para Deutsche Grammophon. "Aquella primera edición era para piano. Mahler había concebido la obra para diferentes densidades instrumentales. Wiener Virtuosen no es una orquesta, tampoco un grupo de cámara. Su tamaño intermedio permite el equilibrio entre la profundidad del sonido mahleriano y la intimidad y el diálogo interno de una atmósfera en la que es posible apreciar la expresividad de cada instrumento".



    Entre los maestros de la Orquesta Filarmónica de Viena se abre paso el barítono con una recopilación de cantos populares alemanes. "¿Qué fue primero, la música o la palabra?", se pregunta Hampson. "No lo sabemos, ni los músicos ni los antropólogos. Mahler fusiona los dos elementos. Así, su música no es una descripción sino una realización. Su sentido dramático no hace referencia a una escena tanto como a las coordenadas de un universo. De alguna manera, cuando cantas a Mahler lo que suena es el cosmos".



    Lecciones 'on line'

    Fundada en Viena en 1986 por Claudio Abbado, la Gustav Mahler es una de las principales orquestas de jóvenes del momento, que va surtiendo de talentos los grandes conjuntos europeos. "Estamos hablando de una formación apasionante, dotada de un gran sentido dramático. Todo lo siente, todo lo padece y tiene la intensidad propia de las nuevas generaciones".



    Lo dice el Hampson profesor de la Manhattan School y del Instituto Curtis de Filadelfia, donde imparte clases de canto a través de internet. "La música clásica es perfectamente compatible con las nuevas tecnologías, que con el tiempo han demostrado ser mucho más humanas y edificantes de lo que pensábamos. No se trata sólo de chips, de datos sueltos y de redes sociales. Hablo de oportunidades reales de conocimiento y de programas educativos que ya están dando sus frutos".



    La paradoja se produce cuando los 30 millones de internautas que siguen los conciertos de la Orquesta Sinfónica de YouTube se ausentan de las butacas de las salas de concierto. "El Digital Concert Hall de la Filarmónica de Berlín o Medici.tv son iniciativas fascinantes. Pero no pueden, y no deben, competir con la experiencia vital de los conciertos. No se puede comparar la curiosidad con la necesidad, el hábito con el ritual, el efecto con la causa".



    Mucho ha cambiado el panorama desde aquellas primeras grabaciones mahlerianas de la mano de su mentor Leonard Bernstein. "Hay mucha gente equivocada en el mundo discográfico. Mahler no puede pertenecer a la industria del entretenimiento ni obedecer a las leyes del marketing. Los nuevos formatos deben abogar por la calidad de las grabaciones y el sentido profundo de la música".



    Hace ocho años que el barítono inauguró la Hampsong Foundation, dedicada al apoyo y la proliferación del arte de la canción en EE UU y alrededor del mundo, como un medio para fomentar la comunicación y el entendimiento entre culturas. "Creemos que la poesía y la música tienen un valor historiográfico que ayuda a conocer y recuperar las idiosincrasias de cada zona". Con esa intención acaba de editar, en sello propio, Wondrous Free, una recopilación de 22 canciones del evangelio americano. "Me gustaría colaborar con algún proyecto de música española. Tengo en mi iPod tres gigas dedicados al talento de Paco de Lucía. Un fenómeno".



    Hampson encontró su voz en las clases de Elisabeth Schwarzkopf. "De ella aprendí que no se puede cantar lo que no eres capaz de escuchar. La voz es, sobre todo, imaginación". Muchos lo consideran sucesor de otro grande, el alemán Dietrich Fischer-Dieskau. "A la gente le angustia la pérdida de estas voces irrepetibles. No hay motivo para la alarma. No creo que las sopranos dramáticas o los tenores heroicos estén en peligro de extinción. Lo que ha cambiado es el planteamiento".



    Hampson, que podría debutar en el Teatro Real a instancias de Gerard Mortier, se prepara estos días el papel protagonista de Heart of a Soldier, ópera compuesta por Christopher Theofanidis en homenaje a los héroes del 11-S que se estrenará en septiembre en la Ópera de San Francisco. "¿Música terapéutica? Todo es posible".