Joaquín de Luz y, a la derecha, Sol Picó

Joaquín de Luz, en la modalidad de interpretación, y Sol Picó, en la de creación, han obtenido hoy los Premios Nacionales de Danza correspondientes a 2016. Estos premios, que concede anualmente el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, están dotados con 30.000 euros cada uno.



El jurado ha concedido este premio por mayoría a Joaquín de Luz por "su trayectoria como bailarín de técnica de brillantez depurada y gran carisma interpretativo, dotes con las que ha abordado los grandes roles del repertorio clásico y neoclásico".



El jurado, además, ha destacado, entre otros muchos trabajos, su reciente interpretación de Basilio de Don Quijote en su colaboración con la Compañía Nacional de Danza. Así mismo, ha subrayado "su labor como embajador de la danza de nuestro país en los principales teatros del mundo".



Por su parte, el jurado también ha distinguido a Sol Picó, por mayoría, "por su talento creativo y fuerte personalidad artística, unidos a la audacia de sus propuestas escénicas". El jurado ha ensalzado además "su profundo conocimiento de los estilos de la danza, para construir su propio lenguaje". Por último, ha destacado su "continuo compromiso con la creación contemporánea" como se demuestra en trabajos como W. W. (We Women), One-hit Wonders, El llac de les mosques o Bésame el cactus, entre otros.



Joaquín de Luz (Madrid, 1976) es bailarín principal del New York City Ballet. Comenzó su formación en danza clásica en la Compañía de Víctor Ullate, donde estuvo desde 1992 hasta 1995. En agosto de 1996 se incorporó a la compañía de Pennsylvania Ballet con categoría de solista. Con esta compañía interpretó roles principales en obras como La Bayadera, Don Quijote y El lago de los cisnes, entre otras. En 1997, entra a formar parte del American Ballet Theater y, un año más tarde, ya es bailarín solista. Además se ha presentado como bailarín invitado en varias compañías y galas de estrellas de danza: como su presentación en el Ballet Mediterráneo en Jazz Swing de Fernando Bujones y la gira por China con el American Ballet Stars en 1997. Un año después representó a España en la Expo'98 de Lisboa, bailando en la Gala Estrellas del Ballet Español.



Joaquín de Luz actuando en el New York City Ballet

En 2003 entró a formar parte del New York City Ballet, primero como solista, y en enero de 2005 subió a la categoría de Bailarín Principal. Desde su primera temporada con el NYCB, ha bailado roles principales en piezas como: Coppelia; El Cascanueces, y Sueño de una noche de verano, entre otras. En España ha estrenado tres coreografías, como director artístico, junto a una selección de bailarines solistas o estrellas del New York City Ballet: Las bodas de I. Stravinsky (2007), Fancy Free (2008), y Homenaje a Ray Charles (2009).



En agosto de 2015 participa en un homenaje a Víctor Ullate en una Gala de Grande de la Danza, en el Auditorio de San Lorenzo de El Escorial. Ese mismo año participa como estrella invitada en la Gala de Clausura del Festival Madrid en Danza, celebrada en los Teatros del Canal de Madrid, interpretando, junto a Maria Kochetkova, dos pasos a dos: El corsario y otro del ballet Giselle. En julio de 2015 organiza en el Teatro Romano de Itálica, Santiponce (Sevilla), otro homenaje a Víctor Ullate, que llevo el sobretítulo de Danza en cuerpo y alma. En diciembre del mismo año es invitado, por José Carlos Martínez, director artístico de la Compañía Nacional de Danza (CND) a interpretar el papel de Basilio, en el ballet Don Quijote, en el estreno del Teatro de la Zarzuela de Madrid.



En marzo de 1996 ganó la Medalla de Oro en la Competición Internacional de Ballet Nureyev de Budapest (Hungría). Un año más tarde ganó el Premio Rising Star que otorga la revista Seven Arts Magazine de Philadelphia. En 2009 es galardonado con el Premio de Cultura en la modalidad de danza, concedido por la Comunidad de Madrid y el Premio Benoise de la Danse por su interpretación de Prodigal Son de Balanchine.



Sol Picó, coreógrafa de la complejidad

Coreógrafa y bailarina afincada en Barcelona, Sol Picó es conocedora de la danza clásica, española y contemporánea, tres disciplinas que se pueden sentir en su trabajo coreográfico, aunque enmarcado en la expresión más contemporánea de la danza. Formó su primera compañía Danza Robadura en 1988 pero es con la compañía que lleva su nombre, la Sol Picó Compañía de Danza, nacida en 1993, con la que ha desarrollado su sello más personal. Una marca que se hace notar tanto en su lenguaje creativo e interpretativo como en el nombre de sus obras. Razona la vaca (1995), E.N.D. (Esto No Danza, 1998), D.V.A (Dudoso Valor Artístico, 1999), Bésame el cáctus (2001), La dona manca o Barbie Superestar (2003), La prima de chita (2006), Las Doñas (2007), Sirena a la plancha (2008), El llac de les mosques (2009), Petra, la mujer araña y el putón de la abeja Maya (2011), Memorias de una pulga (2012), One-hit wonders (2014) o We Women (2015) son algunos ejemplos y montajes de esta creadora.





Estudió en el Movement Research de Nueva York diversas técnicas de danza contemporánea y durante los primeros años de su trayectoria trabajó como intérprete y coreógrafa, con compañías y creadores diversos como Robouldanse, Rayo Malayo Danza y la compañía de Arte Total Los Rinos. El cortometraje dirigido por Octavio Masia y ella misma, El 64, cortometraje de danza en un autobús y el vídeo-danza No Paris del realizador Joan Pueyo, en el que aparece como bailarina y coreógrafa, entre otros, completan una carrera en la que destacan galardones como los premios Max de las artes escénicas al Mejor Espectáculo de Danza, a Mejor Coreografía y a Mejor Intérprete de Danza Femenina por Bésame el Cactus en 2002 y 2003, así como Mejor Espectáculo y Mejor Coreografía por La dona manca… en 2004, Mejor Coreografía por Paella Mixta en 2005, Mejor Espectáculo por Sirena a la Plancha en 2009, o Mejor Coreografía por El Llac de les mosques en 2010, así como el Premio Nacional de Danza de la Generalitat de Catalunya en 2004, en otros galardones.



El jurado, presidido por la directora general del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM), Montserrat Iglesias, con la vicepresidencia del subdirector general de Música y Danza, Antonio Garde, ha estado integrado por Mª Ángeles Carrasco Hidalgo, Laura Lizcano, a propuesta de la Federación Estatal de Asociaciones de Compañías y Empresas de Danza (FECED); José Carlos Martínez García, Carmen Roche Rubio; Xosé Paulo Rodríguez, a propuesta de la Red Española de Teatros, Auditorios, Circuitos y Festivales de Titularidad Pública, y Rosa San Segundo Manuel.



Los premiados en anteriores convocatorias han sido: Compañía La Intrusa (Creación), Rubén Olmo (Interpretación) en 2015, Daniel Abreu (Creación) y María Nazareth Panadero (Interpretación) en 2014, Marcos Morau (Creación) y Isabel Bayón (Interpretación) en 2013, Mónica Valenciano (Creación) y Zenaida Yanowsky (Interpretación) en 2012, Javier Latorre (Creación) y Goyo Montero Morell (Interpretación) en 2011, Àngels Margarit Viñals (Creación) y Rocío Molina Cruz (Interpretación) en 2010 y la Compañía "Mal Pelo" (Creación) y Mª Dolores Greco Arroyo "Lola Greco" (Interpretación) en 2009.