El director, documentalista y periodista Hernán Zin ha presentado este miércoles 25 de junio en el Ateneo de Madrid el anticipo de su próximo documental, Todos somos Gaza (Nacido en Gaza 2). En él, el multipremiado reportero de guerra filma, junto a un gran grupo de periodistas de origen palestino, los dramas humanitarios vividos en Gaza.
El documental recupera el relato original de Nacido en Gaza (2014). En esta película, Zin se dedicaba a grabar el ataque israelí contra la franja de Gaza entre julio y agosto de 2014 por medio del testimonio y la experiencia de diferentes niños gazatíes.
El rodaje de este nuevo proyecto, Todos somos Gaza, comienza el 8 de octubre de 2023. Día en el que arranca el conflicto entre Hamas e Israel y la fecha en la que Nacido en Gaza (2014) se convierte, como consecuencia, en el documental más visto de Netflix. Tras 19 meses de grabaciones y un rodaje sin fecha de conclusión, Zin declara con firmeza: "Gaza es el ejemplo más grotesco de lo que nos espera como humanidad".
En esta nueva película, el cineasta reúne a un grupo de periodistas palestinos, con Yousef Hammash a la cabeza, e intenta reencontrarse con los niños protagonistas de Nacido en Gaza (2014). Su objetivo es contar las masacres del genocidio palestino vividas en las carnes de los ahora adultos palestinos. "Hay momentos que he pensado en suicidarme, porque no podía vivir con el dolor y la frustración de no estar ahí" confiesa Hernán Zin.
Según relata el también director de Nacido en Siria o Morir para contar, el documental les está costando sangre, sudor y lágrimas: "Conseguía un equipo local y me lo mataban". El cineasta argentino asegura que "el gobierno israelí no ha dejado entrar a ningún periodista extranjero en Palestina".
Adelanto de 'Todos somos Gaza' (Nacido en Gaza 2)
Una de las historias que retoma Todos somos Gaza es la de Hamada, el niño bombardeado por Israel en 2014 mientras estaba jugando al fútbol con sus amigos. En la actualidad, Hamada es un adulto casado y con tres hijos, uno de ellos fallecido como resultado de la desnutrición a la edad de tres años. Según Hernán Zin: "Cada vez que encontramos a uno de los niños, primero pienso: '¡Qué bueno que esté vivo!', y después: '¡Qué malo que esté vivo!'".
El director habla de este trabajo de rastreo como algo contradictorio. Según describe, la alegría de reunirse con los que fueron niños en 2014 se entremezcla con la acidez de un sufrimiento que, a la mayoría de ellos, les ha durado toda la vida. Un dolor con el que tendrán que cargar para siempre.
Durante el evento en el Ateneo, parte del equipo del largometraje ha anunciado una campaña de crowdfunding con el propósito de finalizar los tres meses de metraje que, en un principio, le quedan al proyecto. Ante un público a rebosar de ciudadanos hispano-palestinos con las emociones a flor de piel, el director ha adelantado uno de los temas principales del documental, el empleo de la IA con fines bélicos: "Gaza es un campo de experimentación".
"Esto es un genocidio en directo hecho con IA, un arma de destrucción masiva que tiene toda la información de los gazatíes y ejecuta 200 objetivos al día, automatizando la muerte de los palestinos. La película va a explicar todo, incluida la automatización deshumanizadora de los procesos de aniquilación, porque es nuestro futuro", arremete Hernán Zin.
Según explica el director, una llamada con un periodista de The Intercept fue el comienzo de esta macabra idea sobre que Israel está, supuestamente, "industrializando la masacre de palestinos por medio de la inteligencia artificial". Tras recibir esta noticia con desconfianza, Zin comienza un proceso de investigación que se presenta como uno de los temas principales de Todos somos Gaza. Una información que según el cineasta argentino "nadie tiene".
"Son algoritmos que poseen toda la información sobre todos los gazatíes, como la tienen sobre nosotros aquí también; no os creáis. El proceso de selección de objetivos ya no son altos mandos militares, es un algoritmo que decide quién vive y quién muere." El director italo-argentino habla también sobre la existencia de una escala calculada por la IA, la cual decide dónde bombardear según unos criterios concretos. Pautas como los daños colaterales potenciales y la relación de una persona con, por ejemplo, los líderes de Hamas.
El nombre del documental, Todos somos Gaza, no se refiere tanto a una expresión con el objetivo de suscitar la empatía de un Occidente que, según el director, "tiene la obligación moral y legal de intervenir moralmente en Palestina". Sino más bien en que "el futuro de Gaza es nuestro futuro", el de España y Europa. Además, Zin ha dejado claro que no se trata de un tema de antisemitismo, más bien de "devolver al estado palestino lo que merece".
Durante la emotiva presentación del anticipo, el director ha estado acompañado del embajador de Palestina en España, Husni Abdel Wahed, además de sus compañeros: Maysun Abu-Khdei, fotoperiodista hispano-palestina; Yousef Hammash, cineasta, reportero gazatí y "el hombre del terreno", y Raquél Martí, y la directora ejecutiva del UNRWA (Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina en Oriente Próximo).
De izquierda a derecha: Raquel Martí, Yousef Hammash, Maysun Abu-Khdeir y Hernán Zin en la presentación del anticipo de 'Todos somos Gaza'.
Hammash es el reportero principal del documental y, además de un cineasta ganador de un BAFTA y un EMMY, es uno de los muchos palestinos refugiados que han escapado de su tierra por culpa de la guerra. Originario de Jabaliya, una región al norte de Gaza, confiesa: "no hay nada que sea peor como ser humano que el ser echado de un lugar constantemente. El desplazamiento forzado es un viaje humillante".
Aun así, "el hombre del terreno", cree firmemente que "Palestina será libre". Con este objetivo en mente, los cuatro ponentes de la charla coinciden en que la elaboración de nuevas narrativas, la rehumanización del pueblo palestino y la gente joven serán factores fundamentales. "Nunca van a poder robarnos la identidad", proclama Maysun Abu-Khdei, candidata al Premio Pulitzer en 2013 por su trabajo en la Guerra Civil de Siria.
