Nelson Pereira dos Santos

El padre de la versión brasileña de la Nouvelle Vague francesa, autor de Río 40 grados o Qué sabroso era mi amigo francés ha fallecido a los 89 años.

El director de cine Nelson Pereira dos Santos, padre del Cinema Novo brasileño y autor de películas como Qué sabroso era mi amigo francés (1971), ha fallecido el sábado a los 89 años en el Hospital Samaritano de Río de Janeiro por un cáncer de hígado. Hasta los últimos años de su vida, Pereira se mantuvo como una indomable fuerza creativa, siempre ligado a la gente, a la música y a la política de su país, como demuestra el documental que dirigió en 2012 La música según Tom Jobim, sobre el músico y compositor brasileño Antonio Carlos Jobim, que dio a conocer la bossa nova al mundo con A garota de Ipanema.



Con su revolucionario debut de 1955 Río 40 grados, un retrato de Rio de Janeiro con una estética neorrealista rodado a ritmo de samba, el cineasta brasileño dio a los 27 años el pistoletazo de salida del Cinema Novo, un movimiento al que pronto se unirían Glauber Rocha y Ruy Guerra. Bajo el lema "Una cámara en la mano y una idea en la cabeza", estos directores combinaron la exuberancia estilística de la Nouvelle Vague con la cultura popular brasileña y el pensamiento político postcolonial.



Nacido en Sao Paulo en 1928 en el seno de una familia humilde, Pereira estudió Derecho y posteriormente se tuvo que exiliar en París por la persecución del Partido Comunista en el que militaba. Al regresar a su país ejerció el periodismo y la crítica antes de lanzarse a dirigir. De la agonía de Vidas secas (1963) a la sensualidad y el humor negro de Qué sabroso era mi amigo francés, Pereira exploró un amplio rango de perspectivas sobre los problemas de su país, tanto pasados como presentes, sin dejar de lado un profundo humanismo.



El director contaba con un gran prestigio en su país, como demuestra el hecho de que fuera el primer cineasta en entrar a formar parte de la Real Academia de las Letras en 2006. Además participo cuatro veces en el Festival de Berlín y otras tantas en el Festival de Cannes, consiguiendo en 1984 el Premio FEPRISCI por Memórias do Cárcere (1984).