Exposiciones

Luisa Rabbia

21 septiembre, 2006 02:00

Mother, 2006

Marta Cervera. Plaza de las Salesas, 2. Madrid. Hasta el 26 de octubre. De 4.100 a 13.500 e.

Lírico, intimista, luminoso y triste es el tono sostenido en esta primera exposición española de Luisa Rabbia (1970). Un conjunto de obras que ronda en torno al cuerpo humano, el suelo y lo vegetal y en el que la turinesa afincada en Nueva York desarrolla su singular práctica de dibujo a lápiz (rojo o azul, puntualmente los dos al tiempo). En ella entreteje precisión figurativa de efectos volumétricos con un trazo abstraído e inconsciente que va a la deriva provocando ramificaciones y pliegues. Una especie de desarrollo rizomático que se conforma como parte del método plástico y como eje expresivo, conectando además con el tema de las obras que aquí se exponen. En la primera sala de la galería puede verse una instalación escultórica en que se representa a una madre acostada sobre la tierra rodeada de varios pequeños que duermen sobre ella formando una estructura de pliegues de apariencia casi mineral, al tiempo que vegetal, surcada como está de algo que parecen raíces. En la sintonía del sueño las figuras de la madre y sus hijos se confunden con la tierra, arraigándose. El resto de obras son dibujos sobre papel de gran formato. La artista se fija en personajes solitarios y ensimismados, ausentes en un mundo imaginado y de compuestos blancos. En ocasiones, las figuras parecen brotar del suelo al que están unidas. O la ropa con que se visten está cubierta por lo que parecen venas y arterias, que, a su vez, podrían verse como ramas de un árbol plegado. Otras veces, se invierte el ciclo y un árbol brota del cuerpo desnudo de una muchacha de rostro borroso, abandonada. Y el árbol no tiene fruto ni hojas. Evocaciones cargadas de nostalgia sobre las profundidades maternales de los afectos y vínculos del imaginario colectivo.