Image: Rigor y misticismo de Emilio Gañán

Image: Rigor y misticismo de Emilio Gañán

Exposiciones

Rigor y misticismo de Emilio Gañán

21 julio, 2005 02:00

Rojo s/t 7, 2005

Fernando Pradilla. Claudio Coello, 20. Madrid. Hasta el 3 de septiembre. De 350 a 2.320 euros

Nacido en Plasencia en 1971, Emilio Gañán es uno de los pintores jóvenes más interesantes del panorama actual. Ahora presenta su primera exposición individual en Madrid un conjunto de obras que posteriormente viajará a distintas salas de Extremadura. Es la suya una abstracción que mira hacia atrás, hacia momentos diferentes de la pintura del siglo XX, desde la vanguardia europea, con influencias de nombres tan importantes como el de Kandinsky, hasta la pintura "colour field" norteamericana del que destacaremos inevitablemente a Barnett Newman, que es a mi juico la referencia fundamental en la pintura del artista extremeño.
La pintura de Emilio Gañán se apoya fundamentalmente en extensiones uniformes y monocromas, superficies que a veces se definen como un territorio lírico lleno de evocación, y otras aparecen como un espacio resueltamente neutro, menos cálido. Sobre estas superficies, que bien pueden, a mi juicio, remitir a la pintura de campos de color en el sentido propuesto por Robert Rosemblum, el de la percepción extática del vacío, Gañán introduce la sobriedad de la línea en una voluntad de acotar ese gran espacio, de apropiarse y dominar el campo pictórico. Pero no lo banaliza sino que a través del juego de líneas horizontales, verticales y diagonales, el artista alude a ese otro misticismo, propio de los pintores de vanguardia, los interesados en el reordenamiento del espacio a partir de la línea sobre el plano. Gañán subraya esta idea de la acotación mediante un juego de líneas en el borde de los cuadros, creando un espacio cerrado de vibraciones contenidas. El artista admite cierta ilusión de profundidad en muchos de sus cuadros, haciendo referencias, o más bien planteando guiños, a las leyes de la perspectiva. Porque hay algo de ventana en muchos de sus cuadros. Extensión, pues, frente a rigor lineal, expansibilidad y acotación. La obra de Gañan encierra estas paradojas.