Antoni Estrany

Antoni Estrany (Barcelona, 1943) acababa de llegar de México, de la feria Zona Maco, y estaba preparando el viaje a Madrid para participar un año más en ARCO cuando el pasado lunes le sobrevino la muerte. Un infarto al corazón que ha truncado una larga trayectoria como galerista, pionero en el arte contemporáneo catalán.



En 1996, la galerista Àngels de la Mota y Antoni Estrany fusionaron sus galerías para emprender un camino conjunto, con una línea coherente y arriesgada que les ha dado grandes resultados durante más de 20 años, con un interesante plantel de artistas y una notable proyección internacional, que les ha llevado de la Bienal de Venecia a São Paulo. Su galería, Estrany-de la Mota, ha sido un referente de del arte contemporáneo en el centro de Barcelona, que ahora pierde a uno de sus pilares.



Desde que empezara su carrera en los años 70, Antoni Estrany siempre tuvo una visión vanguardista y experimental del arte. En sus inicios, trabajó con Robert Llimós o Sergi Aguilar, al que luego introduciría en la Galería Trece, a la que se incorporó en 1973 y donde expuso también a Frederic Amat. Pero en 1976 prefirió convertirse en un marchante independiente. Miquel Barceló fue uno de sus representados en aquellos años.



No sería hasta 1990 cuando Antoni Estrany abriría su propia galería en pleno corazón del Eixample barcelonés, en el 18 del Passatge Mercader, un privilegiado espacio de 200 metros cuadrados. En el 96 se fusionó con Àngels de la Mota, quien abandonó su galería de Gràcia dedicada a los artistas más emergentes. Juntos desarrollaron una decidida apuesta por el arte joven y por proyectos innovadores y rompedores. Entre sus artistas hoy figuran Ignasi Aballí, David Bestué, Marc Vives, Martí Anson, Patricia Esquivias y Francesc Ruiz.



Muy querido dentro del mundo del arte, galeristas y artistas han expresado su pesar en comunicados y redes. "Es una pérdida importante para el mundo del arte contemporáneo de nuestro país", lamentaron ayer sus compañeros a través de un comunicado emitido por la Asociación de Arte de Barcelona. "Barcelona ha perdido un estandarte del arte más valiente, más consecuente y más internacional. Y además se ha ido un amigo", escribía la comisaria Rosa Martínez en Facebook. Igual que su colega el galerista Norberto Dotor que publicaba en la misma red: "Excelente profesional con una admirable visión de futuro y un magnífico olfato para captar nuevos artistas con los que organizar un proyecto ejemplar de galería, que durante años ha sido y es un incuestionable referente del arte actual". En la misma línea se pronunciaba Carles Taché: "Fue uno de los decanos del arte contemporáneo en nuestra ciudad, un galerista comprometido con el arte de nuestro tiempo".



El Instituto de Arte Contemporáneo ha destacado una trayectoria, de más de 40 años, que "ha sido fundamental en el apoyo y difusión de los nuevos lenguajes del arte contemporáneo, apostando con valentía en muchas ocasiones por artistas conceptuales y poco comerciales".