Muelle de la Tournelle

La obra gráfica de uno de los artistas más importantes del siglo XX recala en la Fundación Canal de Madrid. De lo profano a lo sagrado y viceversa, Marc Chagall tuvo una prolífica carrera pictórica. Pero su vida no fue fácil, las tensiones políticas de su época hicieron que el artista cambiara de país de manera frecuente. Esto hizo que conociera de primera mano las diferentes culturas y maneras de ejecutar el arte que se vislumbra en sus obras. En esta ocasión hasta 100 obras sobre papel muestran las diferentes técnicas que empleó.



Chagall: divino y humano recorre cuatro décadas de carrera a través de las obras procedentes del Kunstmuseum Pablo Picasso Münster (Alemania). La colección completa consta de 137 litografías, xilografías y aguafuertes lo que significa que casi la colección completa sale, por primera vez, del museo. Aunque el artista no era especialmente religioso, los símbolos de la fe judía son parte de su obra. De hecho. La Fundación Canal ha organizado sus salas de manera que remite a una sinagoga y ha reunido las obras temáticamente.



La muestra comienza en el atrio a modo de introducción a lo que viene después; el recorrido por el vestíbulo y la sala de oración, con 65 obras, crean ese juego entre lo profano y lo sagrado tan característico de un artista que consideró su gran obra maestra las ilustraciones que hizo para la Biblia. En esta parte se muestra cómo Chagall introdujo la religión y el factor humano en sus obras. David y Betsabé se yuxtaponen a amantes de la vida real y los símbolos sagrados con imágenes de ciudades.



Esta faceta suya se ve en las 20 obras que aguardan en la siguiente estancia de la sinagoga, el Sancta Sanctorum, donde Chagall interpreta y analiza a los personajes religiosos a raíz de un encargo del editor Vollard. Para documentarse e interpretarla a su manera leyó la Biblia y viajó a Palestina. A esto se dedicó entre 1931 y 1939 hasta que estalló la Segunda Guerra Mundial y tuvo que exiliarse en Estados Unidos. Años más tarde, entre 1952 y 1956 retomó la tarea y completó las 105 imágenes que requería el proyecto.



Y, para acabar con el recorrido, en el Cementerio creado para la exposición aguardan las 15 piezas realizadas para la novela Las almas muerte de Nikolái Gogol. Una de las obras más célebres de la literatura rusa del siglo XIX hizo que Chagalla pusiera su mirada crítica en la sociedad rusa de aquel momento. La crítica se basa en el poder que los terratenientes ejercían sobre los campesinos al pensar que eran dueños de sus cuerpos y almas. Chagall, le da una vuelta a esa tiranía y caricaturiza a esos terratenientes de manera grotesca, como ánimas muertas.



Las piezas seleccionadas para la exposición incluyen todas las técnicas empleadas por Chagall para su obra gráfica. Las grabaciones al agua fuerte, las xilografías y las litografías ilustran el papel fundamental que desempeña la obra gráfica en la creación de Chagall. Se le atribuye a las mismas un lugar de honor relevante en su producción, ya sea desde el punto de vista cuantitativo como cualitativo.