Carlos Alcaraz, durante un entrenamiento en Cincinnati

Carlos Alcaraz, durante un entrenamiento en Cincinnati Cincinnati Open

Tenis

Las 50 victorias de Alcaraz en 2025 y el reto de culminar su mejor año: la decena de torneos para codearse con el 'Big Three'

2023 fue el mejor año del murciano con 65 triunfos y seis títulos. Está a 16 victorias y dos títulos de superar esos registros.

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En pleno agosto, cuando el circuito acelera hacia su tramo decisivo, Carlos Alcaraz ha alcanzado en Cincinnati las 50 victorias en 2025, un hito que ningún otro jugador había logrado a estas alturas del año. Este registro subraya su regularidad y fortaleza mental en todas las pistas.

Con un balance de 50-6 y cinco títulos -Róterdam, Montecarlo, Roma, Roland Garros y Queen's-, Alcaraz ha demostrado una consistencia envidiable. Ahora afronta el reto de superar sus 65 triunfos de 2023 y acercarse a las mayores marcas históricas de Federer, Djokovic y Nadal.

El murciano se encuentra en la antesala de algo grande. Su 89% de efectividad en partidos ganados lo sitúa entre los mejores registros de la era moderna, mientras que sus cinco títulos abarcan tres superficies diferentes, demostrando una versatilidad que pocos poseen.

Con diez torneos ATP aún por disputar, Alcaraz dispone de la ventana perfecta para firmar la campaña más exitosa de su carrera. Cada victoria en el tramo final consolidaría su estatus y ampliaría su legado dentro del tenis moderno.

De las dudas al despegue

El arranque de 2025 no fue el esperado para Alcaraz. Derrotas inesperadas en Doha e Indian Wells pusieron en entredicho su forma física y táctica, generando las primeras dudas sobre su preparación para los grandes desafíos que se avecinaban en el calendario.

Sin embargo, lejos de venirse abajo, el español trabajó en silencio. Pulió su servicio, afinó su agresividad en pista rápida y esperó el momento de resurgir. Ese instante llegó bajo el sol de Montecarlo, donde todo cambió para siempre en su temporada.

Ahí llegó su punto de inflexión. Su triunfo en la final frente a Ruud desató la confianza necesaria para encadenar victorias de manera consecutiva. Ese título en tierra batida recuperó la imagen dominante que le caracteriza y le reafirmó como heredero de Nadal en arcilla.

A partir de Montecarlo, Alcaraz hilvanó una racha gloriosa: semifinal en Madrid, entorchado en Roma y su segundo Roland Garros. Cada triunfo afianzó su solvencia en grandes citas y avivó el debate sobre su capacidad de asaltar la cima mundial este mismo año.

Alcaraz levanta el título de Roland Garros tras remontar ante Sinner.

Alcaraz levanta el título de Roland Garros tras remontar ante Sinner. Reuters Reuters

Su polivalencia quedó patente al alzarse con el título de Queen's, dominando en hierba con elegancia y potencia. Con esta conquista, Alcaraz demostró que no solo es un fenómeno en tierra, sino un competidor completo capaz de triunfar en cualquier superficie.

El espejo del 'Big Three'

Alcanzar la quincuagésima victoria en agosto lo coloca en una élite de élite. Solo Roger Federer (92 en 2006), Novak Djokovic (82 en 2015) y Rafael Nadal (75 en 2013) han superado holgadamente ese total en un año natural. Andy Murray alcanzó 78 triunfos en 2016, y David Ferrer 76 en 2012.

Carlos Alcaraz, pese a su juventud, se ha unido a este selecto grupo con los 65 triunfos de 2023, convirtiendo esa campaña en la mejor de un jugador fuera del "Big Three". Ahora, busca rebasar su propio tope para consolidarse como aspirante continuo a grandes logros.

Entre los que más victorias acumularon en un mismo año, solo Djokovic firmó seis temporadas con más de 70 triunfos, mientras que Federer lo logró en tres ejercicios. Nadie ha igualado esa constancia, lo que realza la proeza de Alcaraz si supera las 65 victorias.

El rendimiento de Alcaraz en 2025 arroja un éxito del 89% en partidos ganados. Solo Federer y Djokovic han rondado ese porcentaje en temporadas icónicas. Este dato estadístico refuerza la facilidad con la que Alcaraz domina sus encuentros y la solidez de su proyecto.

Roger Federer y Carlos Alcaraz, en uno de los palcos en la final del Masters de Shanghái

Roger Federer y Carlos Alcaraz, en uno de los palcos en la final del Masters de Shanghái EFE

Ganar más de 50 partidos en una temporada ha sido patrimonio exclusivo del "Big Four" más David Ferrer en el siglo XXI. Antes de Alcaraz, ningún otro tenista había roto esa barrera de forma consistente, lo que subraya la dimensión de su logro.

10 títulos en juego

Carlos Alcaraz llegó a Cincinnati con ansia de venganza y ya está instalado en octavos de final. Tras defender 180 puntos del pasado año, sus esfuerzos buscarán sumar victorias que acerquen su objetivo de elevar su marca de triunfos.

El US Open será la gran plataforma para engordar su cuenta de victorias. Con cinco partidos de Grand Slam por disputar como mínimo, Alcaraz puede añadir hasta cinco victorias si revalida su título y se prorroga su estado de forma en Nueva York.

La gira asiática promete una veintena de encuentros: Chengdu, Hangzhou, Tokio, Pekín y Shanghái. Cada Masters 1000 ofrece al murciano la oportunidad de sumar hasta tres o cuatro triunfos por certamen, aumentando su margen para el reto de las 66-70 victorias.

El tramo europeo indoor culmina en Amberes, Viena, Basilea y el Masters 1000 de París-Bercy. Sumando rondas, Alcaraz podría jugar incluso ocho partidos más antes de cerrar su calendario, siempre que alcance fases finales y evite sorpresas.

Cerraría la temporada en las ATP Finals de Turín, el Masters de maestros. Clasificarse allí implica hasta tres partidos de fase de grupos más las eventuales semifinales y final. En total, Alcaraz podría disputar cerca de treinta encuentros adicionales para agotar su cupo de torneos.

Matemáticamente, superar las 65 victorias de 2023 requiere ganar al menos 16 partidos más. Una cifra realista si mantiene su nivel actual, evita lesiones y gestiona inteligentemente su calendario sin sobrecargarse en el tramo decisivo de la temporada.