La hoja de ruta de Alcaraz para destronar a Sinner como nº1 del mundo: Cincinnati y el US Open como citas clave para redimirse

Carlos Alcaraz cuenta los días para su regreso a las pistas. El tenista murciano decidió pasar unos días de desconexión tras perder la final de Wimbledon ante Jannik Sinner y afronta ahora una gira americana en la que buscará su redención.

La derrota en cuatro sets ante el italiano supuso un duro golpe para el español, que había reinado en el All England Club dos años anteriores. Esta vez, Sinner se vengó así de la épica remontada sufrida en Roland Garros.

"Ahora voy a tener unos días de vacaciones, de desconectar", declaró Alcaraz tras sucumbir en la hierba del país británico. Se marchó al sur de España para recargar pilas y afrontar dos torneos vitales para él esta temporada: el Masters 1.000 de Cincinnati y el US Open.

Cuando vuelve a jugar Alcaraz: renuncia a un gran torneo y fija su nueva fecha de regreso

Dos campeonatos donde querrá volver a dar un golpe sobre la mesa. Nadie duda de él, sería de locos hacerlo, pero el murciano buscará dejar claro que quiere llegar a ser uno de los mejores jugadores de la historia.

Lucha por estar en lo más alto

Sinner lidera el ranking ATP con 12.030 puntos tras su triunfo londinense. Alcaraz ocupa el segundo puesto con 8.600 puntos, situándose a 3.430 puntos de distancia del número uno mundial que lleva 59 semanas consecutivas.

Sin embargo, la matemática de la segunda mitad de temporada favorece al español. Sinner debe defender 6.030 puntos en los próximos meses, mientras que Alcaraz solo tiene que defender 1.060 puntos hasta final de año.

"Mi objetivo principal es volver a ser el número 1 mundial", declaró recientemente el murciano. La diferencia actual es significativa, pero la distribución de puntos a defender abre una ventana de oportunidad única.

Jannik Sinner y Carlos Alcaraz, en una imagen promocional de Nike

El Masters 1000 de Cincinnati será la primera parada clave en esta hoja de ruta hacia el número uno. El torneo se celebrará del 7 al 18 de agosto, y Alcaraz viajará el próximo lunes a Ohio.

Sinner defiende 1.000 puntos como campeón de la edición anterior, mientras que el de El Palmar apenas debe defender 10 puntos tras su temprana eliminación ante Gael Monfils en 2024. Esta situación invierte las tornas.

El español fue finalista en Cincinnati en 2023, perdiendo una final épica ante Novak Djokovic. Ese precedente demuestra que puede competir al más alto nivel en las canchas duras estadounidenses cuando está en plenitud.

Djokovic reina en Cincinnati tras imponerse a Alcaraz en un batalla épica de casi cuatro horas

El antecedente de 2024 en suelo americano fue especialmente doloroso para Alcaraz. Su eliminación ante Monfils en primera ronda se produjo tras haber perdido la final olímpica contra Djokovic, en un momento de fragilidad mental.

El torneo de Cincinnati sirve tradicionalmente como preparación para el US Open, el último Grand Slam de la temporada. Este año, el torneo neoyorquino se celebrará del 24 de agosto al 7 de septiembre.

Sinner es el campeón defensor del US Open y debe proteger 2.000 puntos. Por el contrario, Alcaraz solo defiende 50 puntos tras su sorprendente eliminación en segunda ronda el año pasado ante Botic van de Zandschulp.

El español conquistó su primer Grand Slam precisamente en Nueva York en 2022, demostrando que las canchas duras estadounidenses se adaptan perfectamente a su estilo agresivo y su capacidad para resolver puntos imposibles.

La debacle de 2024 en Flushing Meadows fue una de las derrotas más sorprendentes de la carrera de Alcaraz. El holandés van de Zandschulp firmó una actuación perfecta para eliminar al entonces número tres mundial.

Más allá del Nº1

La rivalidad entre Alcaraz y Sinner ha definido el tenis masculino en 2025. El español lidera el cara a cara 8-5 tras 13 encuentros, aunque el italiano cortó una racha de cinco derrotas consecutivas.

En 2025 se han medido en tres ocasiones, todas ellas en finales de gran nivel. Alcaraz se impuso en Roma y Roland Garros, mientras que Sinner logró su venganza en el All England Club londinense.

El triunfo en el Masters 1000 de Roma supuso el regreso de Sinner tras cumplir una suspensión de tres meses por dopaje. El italiano demostró que los problemas extradeportivos no habían afectado a su nivel competitivo.

Eso sí, el reparto de Grand Slams en 2025 refleja la paridad entre ambos. Sinner conquistó el Abierto de Australia, su segundo consecutivo, mientras que Alcaraz revalidó su corona en París tras una remontada épica salvando tres puntos.

Alcaraz retiene la corona de París con una remontada épica ante Jannik Sinner en la final más larga de Roland Garros

La final de Roland Garros pasará a la historia como una de las más espectaculares jamás disputadas. Alcaraz remontó dos sets en contra en más de cinco horas de juego, la final más larga en la historia.

Con Wimbledon para Sinner, el balance de Grand Slams en 2025 queda 2-1 a favor del italiano. El US Open definirá si uno completa un dominante 3-1 o si la temporada termina con un equilibrado 2-2.

Ambos tenistas han ganado los últimos siete Grand Slams desde el Abierto de Australia 2024, marcando definitivamente el cambio generacional en el tenis masculino tras dos décadas de dominio del Big Three.

Sinner acumula cuatro Grand Slams (todos desde 2024) mientras que Alcaraz suma cinco desde 2022. A ambos solo les falta un torneo para completar el Career Grand Slam: Roland Garros al italiano, Australia al español.

Sinner, en posición acrobática en la final de Australia. REUTERS

La ventana de oportunidad para Alcaraz es clara. Cincinnati y el US Open representan 3.000 puntos potenciales con una defensa mínima, mientras que Sinner afronta la presión de proteger 3.000 puntos como campeón defensor.

El equipo técnico de Alcaraz, liderado por Juan Carlos Ferrero, ha trabajado intensamente en los aspectos mentales tras los reveses del año pasado. La fortaleza psicológica será clave para aprovechar esta oportunidad única.

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"Estoy listo para volver a recuperar el número uno del mundo", declaró Alcaraz tras Wimbledon. La matemática está de su lado, pero deberá demostrar en las canchas duras estadounidenses que puede materializar esta oportunidad histórica.

La gira americana definirá no solo la lucha por el número uno, sino también el equilibrio de fuerzas en una rivalidad que promete marcar la próxima década del tenis mundial entre dos campeones destinados a escribir la historia.