Miguel Ángel Galán, presidente presidente de la Asociación Transparencia y Democracia en el Deporte

Miguel Ángel Galán, presidente presidente de la Asociación Transparencia y Democracia en el Deporte Gala Espín

Fútbol

Miguel Galán denuncia a LaLiga por el sistema de 'fair play financiero' ante la Comisión Nacional de la Competencia

El presidente de la Asociación Transparencia y Democracia en el Deporte esgrime que el sistema está "perjudicando la competitividad" de los clubes más modestos, además de limitar a Barça y Real Madrid en su pugna con los gigantes europeos.

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El presidente de la Asociación Transparencia y Democracia en el Deporte, Miguel Ángel Galán, ha denunciado el sistema de fair play financiero de LaLiga ante el Consejo de la Comisión de los Mercados y la Competencia (CNMC), organismo adscrito al Ministerio de Economía y encargado de velar por la competencia limpia en los mercados y las actividades económicas.

Entre los argumentos esgrimidos contra el férreo mecanismo de control económico que está provocando que muchos clubes se vean incapacitados para inscribir a sus jugadores, Galán sostiene que este sistema "enmascara un abuso de poder que perjudica la competitividad de los clubes con menores ingresos".

Aunque la denuncia se centra en el desequilibrio competitivo dentro del fútbol español, también se esgrime que el mecanismo de control financiero de LaLiga acaba afectando a clubes como el Real Madrid o el FC Barcelona a la hora de competir en igualdad de condiciones con los grandes del fútbol europeo, beneficiados por normativas más laxas en sus competiciones domésticas.

Este verano, como viene siendo habitual en los últimos años, muchos clubes españoles se han visto obligados a vender a sus mejores jugadores a equipos extranjeros, además de tener serios problemas para inscribir futbolistas.

El caso más paradigmático es el del Sevilla FC o del Getafe CF, que ha tenido que disputar las primeras jornadas con 11 jugadores de campo disponibles y se ve obligado a vender a Christantus Uche antes del cierre de mercado para poder completar su plantilla.

Esto afecta también a los equipos más poderosos, como demuestra un Barça que aún tiene jugadores sin inscribir y cuyas inscripciones completadas (Joan García o Marcus Rashford) han dependido de cuestiones circunstanciales como la lesión de Ter Stegen o salidas de jugadores titulares como Íñigo Martínez.

La descapitalización de talento también ha transformado la realidad de la clase media del fútbol español y limitado la capacidad de muchos clubes para construir proyectos a medio plazo.

"Abuso de poder"

La entidad presidida por Galán considera que, con el fin de cumplir las normas de fair play, los clubes humildes no pueden realizar inversiones para mejorar su rendimiento deportivo, viéndose además obligados a vender jugadores para equilibrar sus cuentas.

"Bajo la apariencia de una gestión responsable, este modelo enmascara un abuso de poder que perjudica la competitividad de los clubes con menores ingresos. Esto crea una barrera que les impide progresar y competir en igualdad de condiciones con los clubes más grandes, perpetuando así una estructura de poder desigual en el fútbol profesional español" reza el comunicado.

"Este modelo perpetúa una estructura jerárquica y piramidal, donde organismos como la Liga Nacional de Fútbol Profesional se sitúan por encima de los clubes, restringiendo su autonomía y la capacidad de los más pequeños para desafiar el statu quo. Este desequilibrio se traduce en una falta de dinamismo deportivo y comercial que fuerza a los clubes con menores recursos a una posición de desventaja permanente", añade.

Perjuicio para Barça y Real Madrid

Aunque el grueso de la denuncia concierne a los perjuicios que sufren los clubes más humildes, también se esgrime que el sistema afecta incluso a los dos grandes del fútbol español (Real Madrid y FC Barcelona) en las competiciones internacionales.

"El riguroso Fair Play Financiero de LaLiga sitúa a los clubes españoles en una desventaja económica frente a sus homólogos de la Premier League, la Serie A o la Ligue 1, donde las restricciones a la inyección de capital son menos severas. Este control estricto reduce su capacidad para competir en el mercado de fichajes".

Para argumentar esta comparación, la denuncia alude al caso del FC Barcelona y sus constantes maniobras para reducir su masa salarial con el fin de inscribir jugadores, mientras otros como el Manchester City o el PSG se han visto beneficiados por inyecciones "considerables" bajo una normativa más laxa.

"El PSG, propiedad de Qatar Sports Investments, pudo fichar a jugadores como Neymar y Mbappé por cantidades astronómicas; y el Manchester City, financiado por el Abu Dhabi United Group, ha invertido masivamente en su plantilla, creando un equipo dominante que no habría sido posible bajo las reglas españolas".

Un sistema impuesto

Además de denunciar sus efectos nocivos, la Asociación critica que estas normas "no emanan del poder legislativo", sino que han sido impuestas por la RFEF y por LaLiga.

"Dado que tanto la RFEF como la LNFP actúan como sujetos de derecho privado al establecer estas normas, su legalidad puede ser cuestionada desde la perspectiva del Derecho de la Competencia. Esta consideración abre la puerta a examinar si estas medidas, al ser impuestas por entidades que ostentan una posición dominante en el mercado, podrían constituir un abuso de posición de dominio".

Jurisprudencia

La denuncia se ampara en la jurisprudencia que emana del caso Bosman, en el que el TJUE sentenció que las reglas de la UEFA y la FIFA limitaban el traspaso de jugadores en contra del artículo 45 de la UE (sobre la libre circulación de trabajadores), o el caso Superliga, donde se dictaminó que la UEFA y la FIFA habían abusado de su posición al prohibir competiciones alternativas.

La denuncia sostiene que, en su intento de "asegurar la estabilidad financiera", LaLiga está infringiendo el artículo 102 del Tratado de Funcionamiento de la UE y el artículo 2 de la Ley de Defensa de la Competencia (LDC).

Al calor de todas estas razones, la asociación pide que se requiera a LaLiga a modificar o eliminar su sistema de fair play financiero, además de una sanción económica por el "impacto" que ha tenido en los clubes durante los últimos años.