Luis Rubiales abraza efusivamente a Jennifer Hermoso.

Luis Rubiales abraza efusivamente a Jennifer Hermoso. REUTERS

Fútbol

El inicio del juicio a Rubiales: las claves del caso por el que se enfrenta a dos años y medio de cárcel por el beso a Hermoso

El expresidente de la RFEF se juega su futuro, acusado de los delitos de agresión sexual y coacciones a la futbolista.

Más información: La juez que investiga a Rubiales por el 'caso Supercopa' imputa también a Gerard Piqué

Publicada

El 20 de agosto de 2023 cambió el sino del fútbol español para siempre. Lo hizo por partida doble. A nadie se le escapa que aquel día llegó el mayor éxito jamás vivido por el balompié femenino hasta el momento con la consecución del primer Mundial en Australia.

Pero también resonará para siempre con fuerza lo que sucedió durante la celebración de aquel logro. El beso que le propinó Luis Rubiales en la boca a la futbolista Jennifer Hermoso desencadenó un terremoto y una crisis sin precedentes en la Real Federación Española de Fútbol que se sigue notando hoy en día.

Aquella imagen dio la vuelta al mundo y, con el paso de las horas, alcanzó una magnitud extraordinaria. A partir de ahí, comunicados atribuidos, disculpas tibias, inhabilitaciones, dimisiones y un maremágnum de acontecimientos que se convirtieron prácticamente en cuestión de estado. 

Todo acabó en los tribunales. Y no sólo con Luis Rubiales como señalado, sino también con Albert Luque, el exdirector de la Selección, Jorge Vilda, el exentrenador de la femenina, y Rubén Rivera, el antiguo responsable de Marketing de la RFEF.

Todos ellos se sientan en el banquillo de un juicio que hoy arranca. Al expresidente se le acusa de agresión sexual y coacciones, y se enfrenta a dos años y medio de prisión. El mayor escándalo que se le recuerda al fútbol español en mucho tiempo busca un veredicto.

Arranca el proceso

Jennifer Hermoso siempre defendió que aquel beso no fue consentido. La Fiscalía llevó los hechos a la Audiencia Nacional y, después de casi ocho meses de investigación y muchos interrogatorios, el juez concluyó que había "sólidos indicios" para afirmar que, efectivamente, aquel beso "no fue consentido y fue una iniciativa unilateral y sorpresiva" de Rubiales.

El comportamiento del expresidente de la RFEF, que también se tocó los genitales en el palco al lado de la Reina Letizia y la Infanta Sofía, será ahora juzgado. A las 10:00 horas arrancará el juicio en la Audiencia Nacional, casi 18 meses después de que aquel episodio desagradable empezara a empañar la imagen del fútbol español.

Este proceso tratará de esclarecer si Rubiales incurrió con aquel beso en la boca de Jennifer Hermoso en un delito de agresión sexual y en otro de coacciones. Esto último se debe a las presiones a las que el expresidente, en connivencia con Luque, Vilda y Rivera, habría sometido a la futbolista para que justificara el beso.

La Fiscalía relata en su escrito la "situación de hostigamiento" a la que se sometió a la jugadora, con unas presiones que llegaron a su familia y de las que también responsabiliza a los otros acusados, "personas de confianza" de Rubiales, cuya "privilegiada situación en la RFEF" dependía de la "suerte" que éste corriera.

La defensa de Luis Rubiales sigue afirmando que el expresidente le dio el beso a Jennifer Hermoso con el consentimiento de la jugadora. También que aquel acto fue una "manifestación de euforia, de máxima alegría y satisfacción". Niega, además, haber coaccionado a Hermoso o haber pedido al resto de acusados que mediaran con ella o su familia.

Los otros acusados, Luque, Vilda y Rivera, también negaron ante el juez que hubieran presionado de ninguna forma a la futbolista o a sus familiares. 

Dos años y medio de prisión

Jennifer Hermoso, la Fiscalía y la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) solicitan en este juicio dos años y medio de cárcel para Luis Rubiales por su actitud en la celebración del Mundial femenino en Australia.

No sólo eso. También piden otros dos años y medio de inhabilitación para poder ejercer cualquier puesto en el ámbito deportivo, además de una indemnización de 50.000 euros para el expresidente. Jenni Hermoso también exige una prohibición a Luis Rubiales de acercarse a menos de 500 metros y que no se comunique con ella en los próximos ocho años.

Para los otros tres acusados, las acusaciones piden un año y medio de prisión.

Jennifer Hermoso será la primera persona en prestar declaración en este juicio. Una vez que termine con su testimonio, hasta veinte testigos están llamados a declarar en la Audiencia Nacional para dar su versión sobre lo sucedido y tratar de arrojar luz sobre los hechos. 

Cuatro mujeres cambiarán por un día el balón por los juzgados. Alexia Putellas, Laia Codina, Irene Paredes y Misa Rodríguez, compañeras además de Hermoso en la Selección, pasarán por la Audiencia Nacional. También la seleccionadora Montse Tomé, el actual seleccionador masculino Luis de la Fuente, así como otros cargos de la RFEF tanto antiguos como vigentes.

Quienes también formarán parte de este juicio en calidad de testigos serán las dos hijas de Luis Rubiales. El expresidente de la RFEF pidió que fueran llamadas a declarar, ya que ellas también estuvieron presentes en la final donde sucedió todo, así como en el avión de vuelta a España con las futbolistas.

El juicio, que está programado entre el 3 y el 19 de febrero, dirimirá si Luis Rubiales cometió los delitos de agresión sexual y coacciones por los que se piden dos años y medio de prisión.