El ‘Prenda’ se jactaba, en un grupo de WhatsApp tras la violación de San Fermín, de haberse "follado a una del Atlético de Madrid"

José Ángel Prenda, acusado de violar a una joven madrileña en San Fermín junto a otros cuatro miembros del grupo de sevillanos que acudió a Pamplona, se habría enorgullecido de lo ocurrido en un chat llamado 'Disfrutones SFC', según se revela en el sumario del caso: “Follándonos los cinco a una, vaya puto desfase, del ATC Madrid (Atlético de Madrid) era… ja ja”. Asimismo, dichos mensajes habrían sido escritos tras otros muchos que dejó en el chat la ‘Manada’: “Follándonos los cinco a una”, “todo lo que cuente es poco”, “puta pasada de viaje”, “hay vídeo”.

La Fiscalía de Navarra, este mismo jueves, ha solicitado 22 años y diez meses de cárcel para cada uno de los cinco integrantes del grupo autodenominado la ‘Manada’. Todos ellos se encuentran en prisión preventiva desde que fueron detenidos tras las fiestas de San Fermín, cuando fueron acusados de violar a una joven madrileña. Una joven, la denunciante, que, según ese chat lanzado por José Ángel Prenda, sería del “ATC Madrid (Atlético de Madrid)”.

Al grupo la ‘Manada', según fuentes consultadas por este periódico, se le acusa de tres delitos: 18 años de cárcel por agresión sexual, dos por un delito contra la intimidad de la joven agredida, y dos años y diez meses por robo. Estas acusaciones han sido notificadas a las partes este mismo jueves y ahora los representantes tanto de la víctima como de los abogados de la defensa presentarán sus respectivos escritos a la Audiencia Provincial de Navarra, que juzgará los hechos acaecidos aquel 7 de julio de 2016.

CRONOLOGÍA DE LOS HECHOS

El grupo la ‘Manada’ había acudido a los Sanfermines el verano de 2016. Todos ellos, la noche de la presunta violación (7 de julio), se encontraban en la Plaza del Castillo de Pamplona, donde se estaba celebrando un concierto con motivo de la celebración de las fiestas.

José Ángel Prenda, mientras se celebraba el concierto, estaba sentado en un banco, al que se acercó la denunciante, que por entonces tenía 18 años (ahora ya cuenta con 19). La víctima había llegado a Pamplona junto a un amigo a disfrutar de las fiestas y comenzó a hablar mientras otros miembros de la ‘Manada’ se acercaban: Ángel Boza, y después otros tres acusados más: Jesús Escudero, Alfonso Jesús Cabezuelo y Antonio Manuel Guerrero. 

La denunciante, posteriormente, les habría anunciado a los miembros del grupo -siempre según el sumario- que se retiraba a dormir al coche de su amigo, con el que habían llegado hasta Pamplona. Ellos la habrían acompañado, no por cordialidad, sino con el objetivo de buscar un lugar donde mantener relaciones sexuales con la chica.

Algunos miembros de la ‘Manada’ habrían preguntado en el Hotel Europa si tenían alguna habitación, por horas o por noche, que la querían “para follar”, mientras la chica estaba alejada. Al no haber habitación libre, habrían seguido acompañando a la joven, aunque el grupo se disgregó. A pesar de todo eso, la denunciante se habría besado con Ángel Boza.

José Ángel Prenda, en una conversación breve con una señora en el nº5 de la Calle Paulino Caballero, habría conseguido acceder al inmueble, con la excusa de que estaba alojado allí. Subió al segundo piso y, posteriormente, habría bajado e instado a entrar a otros dos miembros del grupo, que habrían agarrado a la víctima por los brazos y la habría metido en el portal, tapándole la boca y diciéndole que se callara.

Tras entrar, la habrían llevado a un pasillo sin salida y allí, rodeada por los cinco miembros y sin oponerse, por miedo a sufrir más daño, habría sido forzada a mantener relaciones sexuales con cada uno de los miembros de la ‘Manada’. Allí, la habrían forzado a realizar felaciones, entre otras muchas cosas. Mientras, habrían realizado vídeos y fotografías del incidente, y posteriormente, José Ángel Prenda habría hecho saber a través de dos grupos de WhatsApp, el de la ‘Manada’ y el de ‘Disfrutones SFC’, lo que habían hecho, confesando que la víctima era del Atlético de Madrid.

Dejaron a la víctima sola y, posteriormente, ésta fue trasladada a un centro médico, donde fue atendida. Allí, se le detectó una lesión eritematosa y la denunciante fue curada. Posteriormente, ella presentó denuncia y este jueves la Fiscalía ha pedido para todos ellos 22 años y 10 meses de cárcel por aquellos hechos ocurridos el 7 de julio durante las fiestas de San Fermín.