Ana Soria, junto a sus padres, Federico y Rosario, en una imagen reciente.

Ana Soria, junto a sus padres, Federico y Rosario, en una imagen reciente. Gtres

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Así es la vida de Federico, el padre de Ana Soria, a sus 70 años ejerciendo de abogado y la bonita foto que paraliza la red

Según confirma EL ESPAÑOL, el progenitor de la almeriense sigue activo en su profesión y atiende personalmente a sus clientes en su despacho de Almería.

Más información: Ana Soria vive uno de sus veranos más especiales: un reencuentro inolvidable y cita para dos con Enrique Ponce

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"Septiembre se queda en nuestro corazón", es el mensaje que en las últimas horas ha publicado la almeriense Ana Soria (26 años) en su red social Instagram, acompañando el texto de dos fotografías. En una de ellas, cómo no, aparece el otro protagonista: Enrique Ponce (53).

Se trata de una instantánea en blanco y negro, en la que aparece el diestro de Chiva, sentado en una valla de madera, con el mar de fondo, y besando amorosamente a su razón de amor, Ana, que está de espaldas. La imagen, rápidamente, ha sido de lo más comentada en redes.

¿Por qué dice Ana Soria que septiembre "se queda en nuestro corazón"? Hay quien ha querido interpretar este mensaje como que es probable que la dupla haya dado el paso de formalizar su historia de amor, de casarse. Esa boda de la que tanto se ha hablado y rumoreado.

Enrique y Ana, besándose.

Enrique y Ana, besándose.

EL ESPAÑOL, no obstante, confirma que nada tiene que ver la fotografía con un posible casamiento. Enrique y Ana siguen, formalmente, solteros. Parece que, de momento, no hay planes de boda en el horizonte. Septiembre, pues, será especial por una cuestión que sólo ellos saben.

Más allá de esta fotografía, que durante unas horas ha paralizado las redes, lo que se puede decir es que la pareja continúa con su vida en Almería, ese rincón que hace un tiempo, alrededor de cinco años, eligieron para instalarse y disfrutar de su romance lejos de los focos.

Allí, en Andalucía, ambos viven felices y comparten tiempo y espacio con la familia de Ana Soria; sus padres, Federico Soria y Rosario Moreno, y su hermano, José. Esa es la otra familia, la política y también la elegida, que ha acogido, feliz, a Ponce.

Enrique es uno más y especialmente mención merece la relación que protagonizan en la actualidad el diestro y su suegro, Federico. Ambos se llevan estupendamente, según ha conocido este periódico en varias ocasiones. Federico, por su parte, cumple 70 años este 2025.

Enrique Ponce y Federico Soria, en una imagen de archivo.

Enrique Ponce y Federico Soria, en una imagen de archivo.

Y lo hace en plena forma, en activo, ejerciendo como abogado, y sin visos de jubilarse. De hecho, EL ESPAÑOL puede confirmar que el padre de Ana sigue al frente, diariamente, del despacho de abogacía que capitanea en Almería, y es él quien atiende personalmente a sus clientes.

No sólo esto, también coge las llamadas en primera persona. Su implicación, pues, es máxima. Es de justicia destacar, si se habla de Federico Soria, letrado muy querido en la capital almeriense, su gran amistad con el exjuez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón.

Según la información que controla este periódico, ambos se conocieron en Almería, allá por el año 1983. Ese año, Baltasar llegó a Almería para ejercer de titular del juzgado de instrucción número 3 de Almería en el periodo 1983-1987. Y ahí comenzó esta amistad.

Un fuerte vínculo que se mantiene a día de hoy. Tan es así que Garzón es el padrino del hijo menor de Federico y Rosa, de nombre José. Hace un tiempo, el nombre de Baltasar volvió a vincularse con la familia Soria Moreno.

Especialmente, cuando tuvo lugar la boda de Garzón con la fiscal del Tribunal Supremo Dolores Delgado (62), celebrada en diciembre de 2023. La gran fiesta de celebración tuvo lugar en La Cetrina, la finca de Ponce, y fue Federico Soria quien recomendó el lugar a Garzón.

Federico, su mujer, Rosa, y su hija, Ana, viendo torear a Enrique Ponce, hace un tiempo.

Federico, su mujer, Rosa, y su hija, Ana, viendo torear a Enrique Ponce, hace un tiempo. Gtres

La elección de La Cetrina como sede de la fiesta nupcial no fue casual. La finca, situada en Navas de San Juan, tierra natal de Garzón, simboliza la confluencia de dos mundos: el jurídico y el taurino.

Enrique Ponce y Ana Soria ejercieron de anfitriones, y la presencia de Federico Soria reforzó la idea de que su relación con Garzón va más allá de lo profesional.

Durante la celebración, que contó con medidas de seguridad excepcionales y la presencia de autoridades, ministros e incluso la posibilidad de que acudiera el presidente del Gobierno, se evidenció el peso que tiene Federico Soria en el entorno más íntimo del exjuez.

A pesar de la atención mediática que rodea a Garzón, Federico Soria ha mantenido siempre un perfil bajo. No ha hecho declaraciones públicas sobre su amistad con el exjuez ni sobre la relación de su hija con Enrique Ponce, aunque se sabe que conocía al torero antes que Ana.