Qué fue de Gonzalo Montoya, exnovio de Susana Molina, que lleva cuatro años alejado de la televisión

Hay veces que la vida te lanza señales y uno solo debe captarlas. Eso fue lo que le pasó a Gonzalo Montoya (33 años), uno de los concursantes de realities más queridos y más odiados a partes iguales. Con un hermano gemelo llamado Carlos y una expareja llamada Susana Molina (35), se convirtió en uno de los hombres más mediáticos de la televisión. Pero, ¿qué fue de él?

El sevillano, de 33 años, se hizo conocido en Gran Hermano 14 junto a su hermano gemelo, Carlos (33). Lejos de ganar la edición, llegó a conquistar a Susana, quien fue la ganadora de esa edición y que, en un principio, tenía más conexión con su hermano. Tras abandonar el programa -con el maletín en la mano-, la pareja se trasladó a Sevilla, donde inició una relación de amor que se extendió durante siete años.

Durante su relación, la pareja hizo vida conjunta en la capital hispalense; allí todos les conocían, todos sabían quiénes eran, y tanta fue la comodidad que hasta Susana decidió mudarse -desde su Murcia natal- a Andalucía, dejando a su familia y amigos en la ciudad que la vio nacer.

Nando Montoya, excuñado de Susana Molina, se casa en Sevilla: una divertida boda con lluvia y botellines de cerveza

Gonzalo Montoya y Susana Molina en 'La isla de las Tentaciones'. Telecinco

Sin embargo, durante esos años, la fama de la pareja disminuyó: desaparecieron y estuvieron haciendo su vida. Centrados en sus negocios y proyectos personales, Montoya decidió estar rodeado de la que fue su pareja en Sevilla, hasta que, en 2020, una llamada lo cambió todo.

Un redactor de un nuevo programa, llamado La Isla de las Tentaciones, se puso en contacto con Gonzalo y Susana para comenzar una nueva aventura lejos de casa y de vuelta a la televisión. La pareja viajó a República Dominicana para poner a prueba su relación en uno de los programas más vistos de la historia de la televisión.

2020, plena pandemia, millones de personas encerradas en sus casas y, sin embargo, esta emisión de Telecinco devolvió las ganas de ver la televisión a los más jóvenes. Con audiencias estratosféricas, cinco parejas se ponían a prueba ante solteros y solteras y conocían la verdadera tentación. Este programa consiguió audiencias muy altas y la fama volvió a la vida de Molina y Montoya.

Gonzalo Montoya en una imagen de sus redes sociales. Instagram

No siempre se consigue la fama que se quiere o se necesita. En este caso, la decisión final tomada por la influencer rompió los esquemas del sevillano: quiso romper su relación porque ya no estaba enamorada y necesitaba "abrir los ojos". Esta ruptura pública llevó al límite a Gonzalo y, con ella, se marcó un antes y un después.

Desde entonces, el sevillano quedó muy afectado por la ruptura y reconoció que le había costado mucho superarla. De hecho, en La última tentación, programa emitido tras el rodaje en República Dominicana, reconoció que el proceso de la ruptura con la influencer ha sido el más complicado de su vida.

Además, surgieron noticias de que su expareja podría haber mantenido un presunto romance con el cantante Cepeda (35) -conocido por su paso por Operación Triunfo 2017-, mientras que él tenía un idilio con Mayka (32), otra participante de realities de Telecinco.

Sin embargo, en 2023, el que fue participante de La isla de las tentaciones conoció a María López, tras un largo periodo en solitario y de recuperación emocional. El influencer volvió a encontrar el amor e incluso se atrevió a hacer pública la relación en septiembre de ese mismo año, agradeciéndole a su nueva pareja el haberle ayudado a superar el desamor y "vencer el miedo con amor".

Gonzalo Montoya y María López en una imagen de sus redes sociales. Instagram

Gonzalo en la actualidad

Actualmente, Gonzalo Montoya está completamente alejado de la televisión y enfocado en su faceta de empresario e influencer. El sevillano gestiona una empresa de representación de artistas, además de ser propietario de dos bares de copas en la ciudad andaluza.

También, uno de sus últimos negocios inaugurados ha sido un estudio de tatuajes, VicioTattoo. Se trata de un nuevo establecimiento situado en el centro de la ciudad, cercano al Estadio Benito Villamarín. Todo esto sin abandonar su trabajo como influencer de viajes, compartiendo contenido sobre sus experiencias y colaborando con marcas en sus redes.

Sin duda, un nuevo camino empresarial y profesional que le ha llevado incluso a superar su antiguo miedo a volar, ya que ahora realiza viajes internacionales, visitando numerosos destinos y generando contenido para su comunidad de Instagram y TikTok.

En el ámbito personal, continúa con María López, sin intenciones de boda y orgulloso de lo que tuvo con Susana Molina en su momento, tanto que hasta le ha felicitado por sus nupcias.