La vida de Daniel Sancho (29 años), el hijo de Rodolfo Sancho (48) y Silvia Bronchalo (48), está siendo analizada con lupa desde que vio la luz el atroz crimen de Tailandia del que se confesó culpable. Los motivos por los que asesinó y descuartizó, presuntamente, a Edwin Arrieta los ha ido desvelando él mismo en su colaboración con la Policía tailandesa. 

No obstante, más allá de sentirse como un "rehén" y en una "jaula de cristal", este martes, 22 de agosto de 2023, El programa del verano, de Telecinco, ha revelado tres episodios de la vida de Daniel Sancho hasta ahora desconocidos que dejan entrever el lado más oscuro y conflictivo del hijo de Rodolfo Sancho, en prisión provisional por el presunto asesinato y descuartizamiento de Edwin Arrieta.

Este crimen no es el único problema legal del chef español, sobre el que pesan dos denuncias en España por resistencia a la autoridad y agresión. El primero de estos tres altercados, que reflejan la reacción del joven al verse sometido a instantes de estrés, como ha contado Alfonso Egea en Telecinco, se produjo en el post-confinamiento, en 2020.

[Silvia Bronchalo, madre de Daniel Sancho, se pondrá en contacto personalmente con la familia de Edwin Arrieta]

Daniel Sancho en una fotografía de sus redes sociales.

Daniel asistió con un grupo de amigos a un concierto en algún lugar de la geografía española, y abandonó unos minutos el recinto. Al intentar volver a acceder al lugar, hay un problema con los controladores de acceso que obligó a la Policía a intervenir.

Se desconocen los detalles, pero el nieto de Sancho Gracia acabó denunciado por resistencia a la autoridad y el suceso está judicializado. El segundo y llamativo episodio del pasado de Daniel ocurrió cuando rondaba los 25 años. El chef se encontraba en la madrileña calle de José Abascal, en Madrid, acompañado por una mujer cuando intentó colarse para coger un taxi.

El ciudadano que estaba antes que él en la espera se lo recriminó diciéndole que aguardase su turno como todo el mundo, y la cosa acabó a puñetazos. Este hombre, con severas lesiones, denunció por agresión al hijo de Rodolfo Sancho, que también tiene pendiente con la justicia española este tema.

Por último, existe un tercer altercado. Daniel tuvo un problema con otro miembro de un club privado de Madrid en el que se forman deportistas de élite. Se desconocen los detalles del suceso, pero el chef fue expulsado diez meses del exclusivo centro, y al parecer, incluso, hubo una especie de enfrentamiento entre sus padres y los del otro joven con el que tuvo el encontronazo.

"Son tres episodios que te acercan un poco más a cómo puede reaccionar Daniel Sancho a momentos de estrés, pero para mí el caos más grave es la agresión en la cola del taxi, hay agresión, lo cuenta una persona y tiene una denuncia", ha explicado este martes el periodista Alfonso Egea en Telecinco. 

Proteger a su padre

La información sobre los avances en la investigación que la Policía tailandesa está llevando a cabo para esclarecer el atroz asesinato de Edwin Arrieta continúa llegando a cuentagotas.

Otra imagen de las redes sociales de Daniel Sancho.

Después de que Daniel Sancho asegurase en su primera declaración que acabó con la vida del cirujano colombiano porque estaba amenazando tanto a él como su familia, las autoridades del país asiático han confirmado que no existe ningún mensaje amenazante en el móvil del chef español, algo que podría dar un giro al caso y servir como eximiente de cara a esquivar la pena de muerte.

Big Joke, encargado de la investigación, ha atendido al programa En boca de todos y ha asegurado -algo que ya se comentó hace unos días- que Daniel decidió romper con Edwin porque "iba a casarse con otra persona en Indonesia".

Esta persona sería, al parecer, su novia, cuyo viaje inminente a Tailandia habría precipitado los acontecimientos, y habría propiciado la pelea que acabó con el chef degollando presuntamente al colombiano tras propinarle un puñetazo que hizo que se golpease la cabeza con el lavabo y perdiese el conocimiento.

Sobre las amenazas de muerte del cirujano al hijo de Rodolfo Sancho -que él mismo habría confesado en su declaración-, el jefe de policía ha revelado que dichos mensajes no existen en el teléfono del joven español: "No están esos mensajes porque el propio Daniel lo habría borrado", ha explicado, asegurando que "el principal motivo para acabar con la vida de Edwin era por unos vídeos de ellos con su familia que le podría costar el trabajo a su padre".

Se desconoce qué contendrían esos vídeos, aunque se especula que podrían afectar especialmente a Rodolfo Sancho; y de ahí que su hijo los eliminase.