Finca La Sabina Tempranillo.

Para entender la singularidad de este vino tinto de tempranillo, y la razón de nuestra recomendación, tenemos que trasladarnos a la histórica comarca del Campo de Montiel en Albacete, a unos 17 kilómetros de la localidad de El Bonillo, donde El Guijoso está reconocida como una de las mejores fincas de Europa en cuanto a conservación de la biodiversidad.

Entre sus tierras pedregosas discurre un río, cohabitan conejos, liebres, perdices, ciervos, jabalís y especies protegidas como la avutarda, el águila imperial o el lince ibérico, y crecen romeros, tomillos, lavandas, pinos, encinas, enebros, y uno de los sabinares más valiosos de la Península. Por esta razón, Familia Conesa - Pago Guijoso es una de las 20 únicas bodegas que poseen la denominación de origen Vino de Pago en España, la máxima distinción en materia vinícola.

El terroir de Pago Guijoso aporta una personalidad propia a los vinos.

Con semejante riqueza de flora y fauna, no es de extrañar que todos los vinos de Familia Conesa - Pago Guijoso cuenten con certificación de orgánicos y respondan al concepto de vino de terroir. A partir de un viñedo diseñado por el gurú de la viticultura Richard Smart y considerado como uno de los más elevados de España, esta bodega elabora vinos honestos, con la frescura y complejidad de la tierra en la que nacen y el clima que los arropa.

Finca La Sabina Tempranillo se encuentra dentro de la gama alta, la que comprende los vinos con mayor tiempo tanto en barrica como en bodega de Familia Conesa - Pago Guijoso. Son vinos favorecidos por su ubicación entre los parques naturales de las lagunas de Ruidera y la sierra de Alcaraz, que propicia un microclima continental, con fuertes contrastes de temperaturas entre el día y la noche y las cuatro estaciones del año bien marcadas, lo que hace posible que la uva madure lentamente.

La estructura de la bodega es una mezcla de casona manchega y patio andaluz.

La altitud de 1.100 metros también marca la diferencia. Y por supuesto el suelo de guijarros que da nombre al Pago Guijoso, que añaden mineralidad y contribuyen al confort térmico de la planta desde su raíz.

La de 2018 es la segunda añada de esta referencia cuya etiqueta es un homenaje a la majestuosa sabina de más de 2.000 años que preside la zona social de la bodega, y que destaca tanto por su sabroso paladar como por su ajustado precio (10 € la botella).

Maridaje recomendado

En esta privilegiada finca manchega, una de las más grandes de Europa, no sólo se elabora vino. Sus dominios se extienden a lo largo de 2.000 hectáreas que engloban diferentes cultivos ecológicos, así como una cabaña ganadera ovina. De aquí proceden los quesos Hacienda Guijoso, con D. O. Queso Manchego, madurados en bodegas naturales bajo tierra y curados sobre madera de sabina, que les aporta un aroma inconfundible. Sin duda, el mejor maridaje para este tinto tan especial.

El queso manchego curado es el mejor acompañante de este tempranillo.

Como perfecto reserva que es, Finca La Sabina Tempranillo es ideal tanto para tomar solo como para acompañar cualquier comida. Desde carnes rojas o de caza, asados y aves, hasta carnes blancas, chacinas e incluso arroces y comidas picantes gracias a su equilibrada acidez.

Recetas para maridar con vino tinto Finca La Sabina

• Arroz con lomo ibérico
• Arroz picante mexicano
• Arroz con pitu
• Arroz de presa ibérica y mejillones
• Arroz con oreja
• Rosbif
• Albóndigas de ternera con chimi-curry al estilo del Doña Petrona
• Curry verde de ternera
• Curry fácil de garbanzos
• Carrilleras de cerdo al curry rojo tailandés
• Curry de carrilleras al estilo Massaman
• Cordero asado al horno
• Carne mechada al estilo andaluz
• Asado de carne a la sal
• Secreto ibérico con tomate asado