¿Qué es Mina? 

Mina es un restaurante de cocina de producto, mercado y temporada. ¿Y eso qué significa? Pues que su oferta está totalmente viva y depende totalmente de lo que está disponible en el mercado, según la temporada y el día. Es decir, que se depende del producto, y eso es clave para conseguir que cada plato sea perfecto.

Una de las cosas que más me gustó de Mina es que solo cuenta con espacio para 24 clientes, algo ya cada vez menos común en restaurantes gastronómicos que intentan ser más rentables a costa del volumen, algo que a menudo tiende a que el nivel baje.

En Mina se respira paz nada más entrar, un ambiente relajado en el que tu cuerpo y mente empiezan a aclimatarse desde el primer segundo. 

El menú degustación de Mina 

Pocas veces me pasa algo como lo de Mina, disfrutar de cada plato más que del anterior. En un restaurante gastronómico donde el menú degustación consta de 14 elaboraciones es algo complicado, y siempre hay algo que falla o que no llama tanto la atención como el plato que acabamos de terminar. 

Pero esto no ocurre en Mina, y eso es un reto increíble. Que todo esté a la altura de la misma línea, que cada plato tenga su propia alma y transmita igual o más que los otros. Aunque es incorrecto comprar entre unos platos y otros, es mejor hablar de que cada uno cuenta su historia y a su manera, ofreciendo una nueva experiencia.

Es común que los menús degustación largos tiendan a ser excesivos, y con 14 pases podría parecer así, pero en Mina el producto, su calidad y la técnica hacen que uno no se sienta tan lleno o saturado como ocurre en otras ocasiones. Para la gran mayoría la opción larga es perfecta, y además nos permitirá experimentar todo lo que Mina tiene que contar.

El menú largo cuesta 120€, un precio perfectamente ajustado para su calidad y el nivel de los productos que lo componen, por no hablar del maravilloso servicio y precioso ambiente que nos rodea. La opción corta del menú, con 10 elaboraciones, cuesta 90€.

En cuanto al vino, hay opciones de sobra en una bodega muy bien seleccionada. Lo mejor es dejarnos aconsejar, ya sea para acompañar nuestro menú con diferentes vinos o para elegir una botella. Os sorprenderán y encontraréis cosas que de otra forma nunca habríais conocido, merece completamente la pena.

Resumiendo, Mina nos ofrece una cocina pura en la que el producto es el absoluto protagonista, haciéndonos disfrutar del sabor en estado salvaje.

¿Dónde está Mina?

Mina está en un local junto a la ría de Bilbao, justo enfrente del mercado de La Ribera, desde donde se pueden ver la iglesia y puente de San Antón. Un precioso enclave rodeado de paz y tranquilidad, en un local dominado por el blanco, la madera y la claridad, que se transforma (igual que esta ciudad) con el clima.

Es necesario hacer una reserva previa, y con varias semanas e incluso un mes o dos si vamos a ir en fin de semana, ya que se llena y solo da cabida a 25 comensales.