Hacer pizza en casa es mucho más sencillo de lo que parece, y la muestra la tenéis justo en las líneas que vienen a continuación. Vamos a elaborar una receta de pizza napolitana auténtica, en cantidad suficiente para diez pizzas que podéis congelar y tener siempre a mano.

Hay dos claves para que nos salga bien: el horno y el prefermento. El primero es importantísimo porque una buena pizza necesita mucha temperatura. Nosotros hemos usado el Smart Oven Pizzaiolo de Sage. Se puede hacer en un horno normal sin problema, pero el resultado no será el mismo y por eso recomendamos este. En cuanto al prefermento, va todo explicado en la receta, pero quería insistir porque es la clave de esta receta, así que no os saltéis este paso.

Sage Smart Oven Pizzaiolo

El Pizzaiolo de Sage es un horno específico para elaborar pizzas. Tiene unas dimensiones de 47.2 x 46.5 x 27.3 cm, por lo que aunque sea un aparato más para la cocina es fácil que lo podamos guardar en el hueco de algún armario para no tenerlo siempre sobre la encimera.

Pizza en el Sage Pizzaiolo

La gracia de este horno es que alcanza una temperatura de 400 ºC, algo que nunca vamos a conseguir con un horno de cocina normal. Esta temperatura es la ideal para elaborar pizzas, especialmente si hacemos una napolitana como la de hoy. Esto es importante, y aunque consigáis buenos resultados en el horno de casa, la perfección solo la hemos logrado usando este horno para pizzas de Sage.

Además, tiene un montón de opciones de configuración, ya que nos permite seleccionar el grado de calor por zonas, para tostar más o menos el centro y los bordes de la pizza. Tiene siete modos predefinidos y uno manual, por lo que opciones nunca nos van a faltar. Es apto para cocinar pizzas de hasta 30 centímetros.

Yo nunca había conseguido resultados de pizza tan parecidos a los de un horno de leña en casa como usando este horno pizzaiolo de Sage.

Receta de pizza napolitana

Pizza napolitana

Y ahora vamos a hacer la pizza, una receta clásica napolitana con bordes grandes, aireados y crujientes. Esta receta de pizza os va a cambiar la vida.

Paso 1: Prefermento

El paso más importante e imprescindible. En un táper grande mezclamos 300 ml de agua, 300 gramos de harina 00 italiana (o harina normal de todo uso), 5 gramos de levadura de panadería, 5 gramos de miel. Lo movemos todo bien, tapamos herméticamente, dejamos media hora a temperatura ambiente y lo pasamos al frigorífico un mínimo de 8 horas, pero preferiblemente 24 horas.

Paso 2: Masa de pizza

Para elaborar la masa napolitana disolvemos todo el prefermento en 700 mililitros de agua. Vamos a añadir 1125 gramos de harina, pero en este punto ponemos solo la mitad (a ojo, no importa que sea exacto) y lo mezclamos todo bien. Ahora añadimos 40 gramos de sal y el resto de la harina, mezclamos bien hasta que esté todo integrado.

Paso 3: Manejando la masa

Ahora la masa será muy pegajosa, así que hay que trabajarla. Lo primero será no hacer nada: dejamos la masa en la superficie donde la hayamos mezclado y la tapamos con un bol grande durante 15 minutos para que sea más manejable. Ahora viene la magia: cogemos la masa por la mitad y la levantamos creando una bola o un globo, veréis que se va suavizando la superficie. La metemos en un bol y la dejamos tapada 30 minutos, veréis qué cambio increíble.

Paso 4: Dividimos en porciones la masa

Cortamos la masa en diez partes iguales y creamos las bolas que luego serán las pizzas. Las ponemos en una superficie plana (la bandeja del horno, por ejemplo) con harina debajo para que no se peguen y las envolvemos en papel film. Las dejamos 2 horas a temperatura ambiente.

Paso 5: Salsa de tomate

Vamos a elaborar una salsa de tomate sencilla y tradicional italiana para pizza. Una lata de tomate pelado, un poco de albahaca fresca, una pizca de sal y un chorrito de aceite de oliva. Le damos con la batidora un poco, no queremos hacer un puré, y la tendremos lista.

Paso 6: Horneamos la pizza

Cogemos una de las bolas y sobre una superficie plana ponemos harina y empezamos a expandir la masa desde el centro para echar el aire hacia los bordes, creando el típico hinchado napolitano. La expandimos hasta los 30 centímetros máximos (yo las hago de unos 20), ponemos el tomate encima y los ingredientes que tengamos y lo metemos en el Pizzaiolo de Sage durante exactamente 2 minutos a 400 ºC. Lo vais a flipar.