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    Salsas para el día a día

    Si uno de tus propósitos para este nuevo año era ponerte a dieta, es muy probable que hayas desterrado a las salsas de tu dieta. Los grandes platos de la gastronomía de España suelen mojarse con pan y prescindir de estos jugos se nos hace cuesta arriba. De todas formas, no todas las salsas son malas para la salud e, incluso, pueden encontrarse salsas deliciosas que son sanas y no engordan entre las estanterías de los supermercados.

    Las salsas del supermercado que se salvan tienen dos aspectos en común: tienen una lista corta de ingredientes y uno de ellos se encuentra en un alto porcentaje. De esta manera, la sal y el azúcar que pueden contener se encuentran en una proporción ínfima y no supone un problema para la salud. Además, ese ingrediente principal siempre es saludable y cuenta con ciertos beneficios para el organismo.

    Estos condimentos que no arruinan nuestra dieta son escasos en el supermercado. Lo normal es encontrar productos con un gran número de ingredientes entre los que destacan las grasas de mala calidad y el azúcar en grandes cantidades. Por esta razón, lo mejor es que cocinemos nuestras propias salsas en las que podemos utilizar grasas de calidad como el aceite de oliva virgen extra y verduras frescas. 

    De todas formas, a continuación puedes consultar tres salsas saludables que arrasan en Mercadona.
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    El guacamole

    Esta salsa verde inspirada en la tradicional receta mexicana es uno de los productos más exitosos de los supermercados Mercadona. El guacamole se ha popularizado durante los últimos años por su buen sabor, pero también por ser una receta saludable que puede se puede servir, incluso, como desayuno.

    El guacamole que elabora Mercadona es el mejor que puedes comprar en un supermercado. No sigue la fiel receta de México, pero a pesar de ello se trata de una fórmula saludable. La principal razón es que está formada por un 95% de aguacate y el porcentaje restante está formado por cebolla y ajo deshidratados, jalapeño, cilantro, azúcar, sal y aditivos para mejorar su conservación. Tanto el azúcar y la sal se encuentran en un porcentaje tan bajo que no pueden considerarse negativos.
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    El tomate triturado

    Aunque todos estamos acostumbrados al sabor del tomate frito de bote, la mayoría que podemos encontrar en el súper peca de llevar demasiada azúcar. El tomate triturado puede ser un sustituto mucho más saludable, pero a muchos les parece una salsa sosa en comparación con el frito. Normal; esta salsa lleva tomate y nada más.

    De todas formas, es muy fácil animar esta salsa de manera saludable: con algo de aceite de oliva virgen extra, cebolla y ajo se puede aumentar el sabor de esta salsa sin que deje de ser saludable. Es decir, podemos hacer nuestro propio tomate frito casero de una manera más rápida gracias a que el tomate ya viene triturado.
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    El tsatsiki

    Esta salsa de nombre impronunciable es uno de los últimos pelotazos de Mercadona. La receta está inspirada en una receta griega de salsa de yogur, pero no sigue al pie de la letra la tradicional. Sin ninguna duda, se trata de una receta saludable por la simplicidad de sus ingredientes, pero también por sus buenas propiedades.

    El yogur griego ocupa nada menos que el 70% de la receta y casi el 30% restante está formado por pepino, aceite de oliva y hierbabuena. Si bien es cierto que la salsa también lleva azúcar, sal y algunos aditivos, se encuentran en un escaso porcentaje. Contiene más de un 20% de grasas que proceden de fuentes saludables —el aceite de oliva y el yogur griego— y poco más de un 3,2% de azúcares que, en su mayoría, son los que se encuentran naturalmente presentes en el yogur y el pepino.