Un hombre ha sido condenado a dos años de prisión y a una indemnización de 19.262,86 euros a la víctima por un delito de lesiones agravadas en Segovia, para lo que se ha tenido en cuenta la eximente incompleta de legítima defensa y la atenuante analógica de la embriaguez. 

Según la condena hecha pública por el Tribunal Superior de Justicia, los hechos se remontan a la madrugada del 15 de marzo de 2015, cuando el acusado, con antecedentes penales no computables a los hechos, se encontraba en la discoteca Euphoria de Segovia. Pasadas las 6 horas, cuando salió a fumar, tuvo una discusión con la víctima, de 47 años, por causas no aclaradas. 

En un momento de esta, la víctima se dirigió a su vehículo y sacó un palo grueso de más de un metro y agredió al ahora condenado, aunque no quedó "suficientemente probado si le llegó a golpear". Ante ello, el acusado se defendió y la arrebató el palo para golpear "fuertemente" al agresor en primera instancia impactando en la cabeza, el ojo y el brazo izquierdo con el que se protegió hasta que uno de los porteros pudo hacerse con el palo. 

Como consecuencia de los golpes, la víctima sufrió una herida en la cabeza, en la oreja izquierda y el estallido ocular izquierdo, así como contusión en el brazo, que precisaron de ingreso hospitalario y 45 días para su curación y que le provocó la pérdida de visión completa del ojo izquierdo. 

Ambos se encontraban influenciados por el alcohol en el momento con lo que supone una limitación leve de sus facultades superiores y, según la citada sentencia, no ha podido probarse que el acusado golpeara luego el vehículo de la víctima ni que rompiese el cristal de la ventanilla del conductor.