El día que se desalojó La Molinera y una imagen del libro que han publicado contando la historia del movimiento social

El día que se desalojó La Molinera y una imagen del libro que han publicado contando la historia del movimiento social Leticia Pérez Ical

Valladolid

Dos años de la desokupación de La Molinera: "El nuevo hotel es un capricho, si les sobra capital que lo inviertan en salarios"

Los activistas han presentado un libro explicando cómo surgió este movimiento social, lo que significó para la ciudad y las transformaciones que ha vivido este emblemático edificio.

Más información: La fábrica de harinas que se transformó en el hotel de lujo más polémico de Valladolid

Publicada

Los activistas del proyecto social La Molinera, desalojados hace dos años de la antigua fábrica de harinas situada en la Avenida de Salamanca en Valladolid, han publicado un libro llamado 'La Molinera, un proyecto al servicio del pueblo'.

Una obra de 115 páginas, con numerosas ilustraciones, a través de las cuales hacen un repaso de la historia del edificio como fábrica de harinas y hotel, al surgimiento y desarrollo del proyecto de La Molinera, el impacto del centro social en la vida de la ciudad, "la denuncia de la especulación urbanística o la lucha contra los fondos de inversión y sus cómplices en el mundo de la política, judicatura y policía".

Así lo ha explicado el portavoz de La Molinera, Jorge Lebrero, en declaraciones a EL ESPAÑOL- Noticias de Castilla y León. Un ejemplar que decidieron publicar como "herramienta de defensa ante el proceso de desalojo" que se alargó por "un primer intento fallido". Hace unos meses retomaron la idea con la intención de sacarlo a la luz en el segundo aniversario del desalojo.

El portavoz de La Molinera, Jorge Lebrero, y su compañera Sofía Larrea

El portavoz de La Molinera, Jorge Lebrero, y su compañera Sofía Larrea Cedida a EL ESPAÑOL- Noticias de Castilla y León

Lebrero afirma que les parecía "importante" que "no se perdieran los aprendizajes de esta experiencia" y que los activistas de la ciudad, y de cualquier otra parte del país, pudieran acceder a este material.

Recientemente, se ha conocido que el antiguo hotel Marqués de la Ensenada volverá a serlo tras un acuerdo entre el actual dueño, el zamorano Rodrigo Cobreros, y la cadena malagueña Soho Boutique.

El activista afirma que la noticia de que volverá a convertirse en un hotel de lujo "no es ninguna sorpresa" pero que están expectantes de "ver si se materializa" puesto que desde 2023, tras el desalojo, su propietario "expresó que diría cuál sería su plan y ni siquiera conocía el estado del edificio que adquiría".

Inauguración del centro social La Molinera

Inauguración del centro social La Molinera Eduardo Margareto Ical

Lamenta que la falta de inversión pública facilitó su venta a un particular "por apenas un millón de euros" y piden que no reciba financiación pública. Denuncian que se trata de un proyecto "especulativo" y recuerdan que su antecesor, el hotel de cinco estrellas Marqués de la Ensenada, recibió 255.000 euros procedentes de fondos europeos (Feder) y del Ministerio de Economía y Hacienda.

"Esperamos que no suceda algo similar y que haya una vigilancia social al respecto", subraya. Por otro lado, no auguran un buen futuro al hotel. Explica que hay 35 en Valladolid y que la construcción de algunos otros está prevista para los próximos años. Por esta razón, sostiene que deberán "competir con muchos otros empresarios del sector".

Lebrero recuerda que los actuales propietarios provienen de la industria de la producción de lácteos y, desde su punto de vista, "se deberían haber quedado en ella y, si les sobraba el capital, haber invertido en mejorar los salarios y las condiciones laborales de los trabajadores a su cargo".

Por otra parte, mantiene que la adquisición del edificio les parece "un capricho" y alude a un refranero popular como culmen a esta situación: "La avaricia rompe el saco".

La Policía Nacional el día de la desokupación de La Molinera

La Policía Nacional el día de la desokupación de La Molinera Leticia Pérez Ical

Dos años de la desokupación

El activista recuerda que La Molinera "nunca tuvo un fin habitacional", sino que era un proyecto dirigido a la juventud y con la mirada puesta en la "formación social, ideológica y política"; además del ocio y la cultura.

Asimismo, aclara que en las raíces del mismo estaba implícito el "cuestionamiento a los límites de la propiedad privada" y critican que "no puede ser que solo tenga derechos quien tiene dinero".

Por otra parte, añaden que este edificio es un Bien de Interés Cultural desde 1991 y aseguran que "el patrimonio de la ciudad no puede acabar una y otra vez en manos del lucro económico particular".

Varias personas en una manifestación para pedir que La Molinera no fuera desalojada

Varias personas en una manifestación para pedir que La Molinera no fuera desalojada Rubén Cacho Ical

Lebrero recuerda que durante los últimos años la okupación de viviendas ha sido un tema "muy candente" y que este "responde a la batalla cultural desplegada por la derecha y la inacción ante este argumentario desde la izquierda institucional".

Afirma que, con este debate, se "desplaza" la atención del elemento que consideran fundamental y es que cada vez es "más difícil" acceder a cualquier tipo de vivienda y "la ingente proporción de los salarios que se está comiendo el alquiler".

Finalmente, el activista de La Molinera cree que la mayoría de la sociedad entendía en qué consistía el proyecto que defendían: "Lo explicamos reiteradamente y fuimos fieles a lo que dijimos que íbamos a hacer. No solo se comprendía, sino que se apoyaba su continuidad".