Paqui y José Antonio en La Cantina de Chichí de Olmedo
La coqueta cantina que brilla en un famoso pueblo de Valladolid: más de 80 años de historia y dos luchadores al frente
Por el lugar han pasado grandes escritores, historiadores e incluso políticos. Allí se celebran también tertulias literarias.
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Olmedo es un municipio de la provincia de Valladolid que se ubica a unos 40 kilómetros al sur de la capital. En la actualidad y según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) cuenta con una población que asciende a los 3.564 habitantes que reciben con los brazos abiertos a los turistas que hasta el lugar se acercan.
Allí destaca el centro de la villa, con su Plaza Mayor. La típica plaza castellana porticada que se encuentra rodeada de casonas. Cerca de la misma nos encontramos con la Plaza de Santa María, también con la Iglesia de Santa María del Castillo que merece la pena visitar.
Allí se lleva también eso del buen comer y del buen beber y podemos disfrutar en lugares únicos y con mucha historia como puede ser La Cantina de Chichí, que cuenta con más de 80 años de historia.
Fachada de La Cantina de Chichí en Olmedo
EL ESPAÑOL de Castilla y León charla con José Antonio Blanco, el actual dueño, que saca, cada día junto a su pareja, Francisca Ortúñez (Paqui), el negocio adelante.
La vida de José Antonio
“No soy una persona que se defina a si misma. Me gusta que lo hagan los demás. Yo soy un hombre que se define como un trabajador que intenta sacar adelante su negocio cada día, nada más”, asegura, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León, José Antonio Blanco.
Nuestro entrevistado nació en Olmedo hace 67 años. Recuerda con nostalgia su infancia y asegura que, gracias a sus padres “no le faltaba de nada”. Con diez años se fue a Valladolid a Los Hermanos de las Escuelas Cristianas de los Frailes, también pasó por el Monasterio de Bujedo y volvió a casa para seguir estudiando en la localidad pucelana hasta incorporarse a la vida laboral.
“Como la mayoría de los jóvenes de mi edad, de pequeño quería ser futbolista. De hecho, llegué a jugar, de forma fugaz en el Atlético de Madrid juvenil, también durante una temporada en el Villaviciosa de Odón. Luego pasé por muchas ciudades de España hasta que en 1983 me puse al frente de La Cantina de Chichí”, asegura.
Fue un poco por “obligación”, confiesa. En 1981 su padre Jacinto cerró sus puertas, pero él consiguió salvar un negocio hostelero que es de los más longevos del lugar.
Una cantina histórica
“La Cantina de Chichí es uno de los negocios más longevos de Olmedo. Lo abre mi abuelo Benito en 1939, después de la Guerra Civil y está con ella hasta que en 1957 coge las riendas mi padre Jacinto que cierra en 1981. Desde 1983 me puse yo al frente”, asegura nuestro protagonista.
Un negocio, por tanto, que cuenta con 85 años de historia, ni más ni menos, y que se ubica en la carretera a Medina del Campo, en concreto en la calle Senovilla, en el número 1 de dicha vía. Es pequeña pero coqueta, tiene 45 metros cuadrados.
Interior de la cantina que se ubica en Olmedo
“Desde el año 2000 llevo el negocio con Paqui, mi pareja. No tenemos cocina, pero contamos con una clientela fija. Es un lugar para tomar algo. Se ponen aperitivos clásicos y tenemos la fama de contar con los mejores vinos de Rueda, Cigales y Ribera del Duero”, apunta nuestro entrevistado.
Confiesa que hace años se hacía un arroz con liebre que “quitaba el sentido” pero que ahora allí acude la gente a tomar un buen café o ese vino anteriormente citado. También hacen meriendas, comidas y cenas por encargo.
Un “emblema cultural”
“Los vecinos del pueblo están muy contentos. Hay alguno que comenzó a venir con 14 años y que mucho tiempo después sigue acudiendo, aunque ahora las costumbres han cambiado y el chateo ha bajado mucho con la consecuencia de que hay menos gente, pero vamos sobreviviendo”, afirma José Antonio.
El hostelero asegura que su cantina “ha sido un emblema cultural” por la que han pasado grandes y reconocidos escritores de la talla de Miguel Delibes y también su hijo Germán o Jiménez Lozano, entre otros. Grandes poetas, escultores, pintores y personalidades políticas como concejales, alcaldes, diputados o senadores de todos los signos políticos.
Entre estos políticos están Gregorio Peces-Barba, Tierno Galván, Julio Anguita o los hermanos Solana, tanto Javier como Luis.
Imagen del interior de la Cantina de Chichí en Olmedo
“Gracias a mi amistad con estas grandes personalidades del mundo de la cultura y, sobre todo, historiadores como Julio Valdeón y otros como José Pérez Francés o Francisco Rico me aficioné a la historia y tengo publicados dos libros, con el tercero en marcha, sobre Olmedo. También varias colaboraciones en otros libros y el Anuario de Castilla y León además de decenas de artículos en medios de comunicación de Valladolid”, explica.
Hace 15 años comenzaron con una actividad destacada. Ahora se realiza los viernes. Son conversaciones literarias en las que debaten sobre una obra determinada. “Esto ha llevado a un grupo de once personas a publicar un libro que se llama ‘Relatos de Cantina’”, añade.
Nuestro entrevistado apunta que “ve el futuro a la vuelta de la esquina” y que “piensan en jubilarse en un año y medio más o menos” pero que “aguantarán hasta entonces”.
Olmedo sufrirá, por aquel entonces, una pérdida irreparable. Mientras tanto, toca disfrutar de esta pequeña y coqueta cantina y de todo lo que ofrece, que es mucho.