Este sábado, Hinojosa de Duero celebra su mercado medieval, que representa un acontecimiento histórico acaecido en la localidad referente a la expulsión del señor feudal de su castillo por el pueblo. Cerca de una treintena de puestos de artesanos han mostrado de lo mejor de los productos autóctonos de elaboración propia. La concurrencia ha sido importante, en cuanto que los pueblos aún tienen una población ociosa en las vacaciones de verano. Aunque, como dijo el alcalde, José Francisco Bautista, "cada vez cuesta más organizar este tipo de eventos".

Para rememorar ese hecho histórico, el Ayuntamient organiza lo que se llama Mercado del Feudal, en el que se dan cita artesanos con productos de primera calidad. Además, es momento para degustar la gastronomía local y también para la diversión. Eso sí, apuntan los artesanos que "cada vez se consume menos por la gente de los pueblos. Es muy complicado sacar adelante los negocios locales. Muchas visitas, sí, pero poco movimiento en cuanto a las compras".

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El Feudal de Hinojosa

Hartos ya de los abusos del feudal, los hinojoseros, la noche de San Juan, se unieron y se alzaron contra él asaltando el castillo. Al opresor, apenas le da tiempo a vestirse, por lo que se representa con una sola calza, y tras la lucha, logra huir a Portugal, dando lugar a la tradición del 'Baile de la bandera', que se 'echa' cada 24 de junio.

En resumen, los hinojoseros recrean este suceso acontecido en 1441, cuando una pareja contrae matrimonio y el señor feudal reclama su 'derecho de pernada', impidiendo así que los recién casados pasaran la noche de bodas juntos, lo que provocó una revuelta en el pueblo.

Una rica historia

El poblamiento humano del municipio data del Neolítico (dólmenes de la Nava del Río), atestiguándose la posterior presencia vettona en los castros de Moncalvo y de la Escala, así como la romana por la necrópolis de la Cabeza de San Pedro en la confluencia de los ríos Huebra y Duero. La propia estructura de Hinojosa parece responder a un primer poblamiento romano, que posteriormente habría sido utilizado por los repobladores medievales al pasar a formar parte esta localidad del Reino de León desde el siglo XI, repoblación leonesa de la que queda como testigo la ermita del Santísimo Cristo de la Misericordia, del XIII. La cesión al Temple del Abadengo por parte de Fernando II de León en el siglo XII hizo a esta localidad pasar a depender de la Orden del Temple hasta que en el siglo XIV pasó a ser un señorío solariego, el Marquesado de Hinojosa, del que los vecinos se desprendieron en el siglo XV, quedando como recuerdo de aquella hazaña el "baile de la bandera".

La firma del Tratado de Alcañices en 1297, que reajustó las fronteras entre León y Portugal perdiéndose los territorios del Riba-Coa por parte leonesa, afectó a Hinojosa al exponerla a una mayor situación de frontera, sufriendo con posterioridad algunas embestidas y saqueos por parte del ejército portugués que tuvieron como consecuencia directa a principios del siglo XIX la despoblación del poblado de San Leonardo, abandonado desde entonces. Con la división territorial de España de 1833 en la que se crean las actuales provincias, Hinojosa queda encuadrada dentro de la Región Leonesa, formada por las provincias de León, Zamora y Salamanca, de carácter meramente clasificatorio, sin operatividad administrativa, que a grandes rasgos vendría a recoger la antigua demarcación del Reino de León (sin Galicia ni Asturias ni Extremadura), pasando a formar parte del partido judicial de Vitigudino en 1844. En 1887 se abrió la Línea La Fuente de San Esteban-Barca de Alba, que uniría Salamanca con Oporto, gracias a la cual Hinojosa pasó a tener servicios ferroviarios durante casi un siglo hasta su cierre en 1985.