La inflación anual estimada del Índice de Precios al Consumo (IPC) aumentó en septiembre hasta el 2,7% en la provincia de Salamanca, de acuerdo con el indicador elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Son dos décimas más que el mes anterior y cuatro más que la media nacional.

Aumenta principalmente por el alza del precio de la energía. En concreto, el grupo de la vivienda sube al 6,6%, debido al incremento de los precios de la electricidad, frente a la establididad registrada el pasado año. También influye, aunque en menor medida, el aumento de los precios del gasóleo para calefacción, mayor este mes que en 2017, y del gas, cuyos precios bajaron en septiembre del año anterior.

Y se nota además el aumento en hoteles, cafés y restaurantes, cuya variación del 1,1% está causada en su mayor parte porque los precios de los servicios de alojamiento disminuyen este mes menos de lo que lo hicieron en septiembre de 2017.

La inflación sería todavía mayor de no ser por los alimentos y bebidas no alcohólicas, que desciende su tasa anual hasta el 2,5%. Destaca en esta evolución la bajada de los precios de las frutas, frente al aumento del año pasado, y, en menor medida, que los precios de las legumbres y hortalizas suben menos este mes que en 2017.

Y el transporte, con una variación del 6,1%, tuvo los precios de los carburantes y lubricantes con una subida menor este mes que en septiembre de 2017, también debido a la bajada de los precios del transporte aéreo, mayor este mes que en el mismo mes del año anterior.