La concejal de Urbanismo y Medio Ambiente del Ayuntamiento de León, Ana Franco, ha reiterado en la segunda comparecencia pública de la parte política en la comisión de investigación sobre la operación 'Enredadera' que no ha recibido "nunca" ningún tipo de "presión ni petición" por parte del alcalde, Antonio Silván, ni por ninguna empresa ni empresario, en la elaboración de los contratos de su área.

Así lo ha asegurado Franco este miércoles durante la comisión en la que ha respondido tanto a las preguntas de su partido como a las de Cs sobre los cuatro contratos de su Concejalía que fueron llevados por la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) durante su registro en el Consistorio leonés en el mes de julio.

La edil popular ha defendido la legalidad de todas las decisiones tomadas sobre dichos contratos y ha afirmado que le consta que los cuatros expedientes están fiscalizados jurídicamente. Además, ha aseverado que no hubo "nunca" ninguna anomalía en la elaboración de los pliegos.

En ese sentido, Franco ha señalado que "de la elaboración de los contratos se encargan los técnicos" y ha asegurado que confía "totalmente" en los funcionarios que participaron en la creación de los expedientes. Asimismo, ha remarcado que las empresas a las que se adjudicaron los proyectos "eran las mejores ofertas".

Por otro lado, la concejal se ha negado a hacer "juicios de valor" sobre las conversaciones de Silván con el empresario José Luis Ulibarri. De la misma forma, ha enfatizado que no existe ninguna grabación que pueda poner en entredicho las declaraciones que ha dado durante su comparecencia.

Por otra parte, tres de los cuatro técnicos municipales que fueron llamados a comparecer en la comisión de investigación también se han presentado a declarar, pero ha sido de forma privada. Sin embargo, el exconcejal de Seguridad, Ricardo Gavilanes, que también fue citado por la comisión, no se ha presentado.