El consejero de Economía y Hacienda y portavoz, Carlos Fernández Carriedo, comparece en rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno. ICAL
La Junta defiende cuatro años de legislatura “completa, intensa y útil”: 22 leyes aprobadas y alguna en el cajón
Carriedo saca pecho de las "mayores rebajas fiscales de la historia" de la Comunidad y destaca el refuerzo de la sanidad y los servicios sociales en el balance del mandato.
Más información: Mañueco despide la legislatura “satisfecho” y evocando la pinza PSOE-Vox: “De no dar la mano a terminar agarrados”
La Junta de Castilla y León ha realizado un balance “muy positivo” de la legislatura que acaba de concluir en las Cortes autonómicas, destacando tanto la intensidad del trabajo parlamentario como “la continuidad de la acción” del Ejecutivo, pese a la finalización del calendario legislativo.
Así lo ha señalado el portavoz del Gobierno autonómico, Carlos Fernández Carriedo, quien ha subrayado que el Ejecutivo “seguirá funcionando con plena normalidad” mientras no se convoquen elecciones.
Fernández Carriedo ha aclarado que, aunque el trabajo parlamentario ha concluido conforme al calendario establecido, el Gobierno autonómico mantiene su agenda activa.
En este sentido, ha anunciado que antes de finalizar el año 2025 están previstos todavía dos Consejos de Gobierno más, los días 23 y 30 de diciembre, que se suman al celebrado esta semana. “Las elecciones no están convocadas y el Gobierno de Castilla y León va a actuar con todas sus competencias mientras nos corresponda”, ha afirmado.
El portavoz ha incidido en que, a diferencia de otras administraciones que han dado prácticamente por cerrado este periodo, la Junta mantiene una actividad intensa tanto en lo que resta de año como de cara a 2026. “El trabajo del Ejecutivo sigue vigente, más allá de que las Cortes hayan completado el pleno de la legislatura”, ha recalcado.
En su balance de la legislatura, Fernández Carriedo ha puesto en valor que se han completado íntegramente los cuatro años de mandato y los ocho periodos de sesiones previstos, lo que ha permitido desarrollar una actividad parlamentaria “muy intensa”, marcada además por la presencia de un mayor número de grupos políticos que en etapas anteriores.
Durante este periodo, la Junta se ha sometido de forma constante al control parlamentario y ha impulsado una relevante producción legislativa. En total, se han aprobado 22 leyes, que el portavoz ha agrupado en cinco grandes bloques temáticos.
Rebajas fiscales y estabilidad presupuestaria
El primer bloque corresponde al ámbito tributario y presupuestario. En este apartado, la Junta ha destacado las sucesivas rebajas de impuestos aprobadas a lo largo de la legislatura, que sitúan a Castilla y León, según ha defendido el portavoz, “con los impuestos más bajos de su historia”.
Asimismo, se han aprobado cuatro techos de gasto, uno por cada ejercicio, y varios presupuestos autonómicos, lo que, a juicio del Ejecutivo, ha aportado estabilidad y certidumbre a la gestión económica de la Comunidad.
El segundo bloque legislativo se centra en la protección de las familias, la calidad de vida y el fortalecimiento de los servicios públicos. En este ámbito se incluyen normas como la Ley de Atención Residencial, la Ley de Apoyo a las Personas con Discapacidad, la Ley de Servicios Autonómicos Esenciales y el blindaje de los servicios públicos.
Especial mención ha realizado Fernández Carriedo a la ley aprobada por unanimidad en el último pleno de las Cortes, relativa a los puestos sanitarios de difícil cobertura. “Refleja claramente que en Castilla y León la calidad de los servicios públicos es una prioridad y que somos capaces de alcanzar grandes acuerdos”, ha señalado.
El tercer bloque legislativo ha estado dedicado al medio rural y al sector agrario y ganadero. En él se encuadra la Ley de Sanidad Animal, así como las bonificaciones de tasas veterinarias y de caza y pesca aprobadas en el último mes, medidas con las que la Junta ha querido reforzar su compromiso con el territorio y el sector primario.
Función pública
El cuarto eje de la legislatura ha abordado cuestiones relativas a la función pública y la atención a los ciudadanos.
Entre las principales medidas destacan la implantación de la jornada laboral de 35 horas para todos los empleados de la Administración autonómica, la regulación del sistema de información de la Junta para aumentar la transparencia y el decreto ley aprobado recientemente para mejorar las condiciones retributivas de los empleados públicos.
El quinto bloque se ha centrado en la cultura y el patrimonio, ámbitos que el Ejecutivo considera fundamentales para la identidad de Castilla y León. En este contexto, se ha aprobado la Ley de Patrimonio Cultural de Castilla y León, una de las normas más relevantes del mandato.
El portavoz ha querido agradecer expresamente el trabajo realizado por todos los grupos parlamentarios y, de manera individual, por los 81 procuradores que han formado parte de las Cortes durante esta legislatura, así como por aquellos que han sido relevados a lo largo del mandato.
Asimismo, ha destacado el simbolismo del último pleno, marcado por las despedidas y por la aprobación unánime de una ley respaldada por ocho partidos políticos y procuradores no adscritos.
“Es un buen mensaje para Castilla y León y demuestra que es posible alcanzar acuerdos importantes”, ha afirmado.
Deberes
Fernández Carriedo ha reconocido que no todas las iniciativas impulsadas por la Junta han podido salir adelante.
Entre las normas que han quedado pendientes ha citado, especialmente, el proyecto de Presupuestos de la Comunidad para el próximo ejercicio, que incluía medidas como la puesta en marcha del transporte a la demanda (Buscyl), los helicópteros sanitarios en todas las provincias y en El Bierzo, ayudas compensatorias para autónomos por el incremento de cotizaciones, programas para facilitar que los mayores permanezcan en sus hogares, la supresión de peajes en autopistas o mejoras en materia de incendios forestales y gestión del monte.
“El esfuerzo que hemos hecho ha sido importante, pero no hemos conseguido aprobar todo”, ha admitido el portavoz, quien ha confiado en que estos proyectos puedan retomarse en la próxima legislatura “si las circunstancias lo permiten”.
En cualquier caso, ha concluido que, pese a la fragmentación parlamentaria, los acuerdos alcanzados “han sido muy importantes para el conjunto de los ciudadanos”, y ha defendido que el balance global de la legislatura es claramente positivo.