UPL denuncia que Valladolid se lleva el 60 % del gasto en vigilancia

Unión del Pueblo Leonés (UPL) vuelve a alzar la voz contra lo que considera una injusticia territorial evidente. Esta vez, la denuncia se centra en el reparto del gasto previsto por la Junta de Castilla y León en el nuevo Acuerdo Marco para la vigilancia de edificios públicos.

Según los datos aportados por los leonesistas, Valladolid acapara 36,9 millones de los 63 previstos, lo que supone “prácticamente el 60% del total de la inversión consignada por la Junta para toda la comunidad en esta materia”.

Desde UPL califican este desequilibrio como “una muestra palpable del centralismo existente en la comunidad de Castilla y León y la concentración de sedes y organismos en la ciudad de Valladolid”.

Y añaden un dato especialmente significativo: la inversión en la provincia vallisoletana prácticamente triplica la suma total que recibirán León, Salamanca y Zamora, que se quedarán con apenas 13,3 millones.

Más allá de los números, el partido advierte de que este reparto evidencia una dinámica que se repite: “León, Salamanca y Zamora tienen un número de sedes y funcionarios muy por debajo de los que por nivel de impuestos, territorio y población les corresponderían”, denuncian.

Y subrayan que la Región Leonesa representa el 40% de la población de la comunidad y el 41% del territorio.

Esta crítica llega poco más de dos años después de que UPL llevase a las Cortes una Proposición No de Ley en la que reclamaban una descentralización real de las sedes autonómicas. Aquella iniciativa fue tumbada por los votos en contra de PP y Vox.

En ese debate, el Grupo Popular llegó a afirmar que “la birregionalidad de la Comunidad no existe”, mientras que Vox advirtió que “centrifugar produce daños irreparables en las naciones” y que “la buena administración no se logra con delirios disgregadores”.

A la vista de los nuevos datos, UPL considera reforzada su tesis sobre la necesidad de crear una comunidad autónoma propia para León, Salamanca y Zamora.

Según explican, el objetivo es que “reviertan en esta tierra los impuestos que pagamos sus ciudadanos, incluyendo lo destinado a nuestros funcionarios autonómicos y las sedes de la comunidad, que generan una economía a su alrededor, y que estamos pagando mayoritariamente para que generen esa economía en Castilla”.

Eso sí, insisten en que su propuesta no busca sustituir un centralismo por otro: “No pasa en ningún caso por generar un nuevo centralismo”, afirman, y defienden “un reparto de sedes entre las provincias de León, Salamanca y Zamora justo y equilibrado”, en el que, aseguran, “ganemos las tres provincias”.

Además, subrayan que El Bierzo “deberá tener un peso específico y acoger también sedes de la autonomía de la Región Leonesa”.

Para UPL, el caso del gasto en servicios de vigilancia es solo la punta del iceberg. Un síntoma más de una comunidad donde, a su juicio, las decisiones y los recursos siguen girando casi siempre alrededor del mismo centro.