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Región

La Comunidad, la cuarta con menos lista de espera quirúrgica

22 mayo, 2018 16:45

Castilla y León es la cuarta comunidad autónoma con menos pacientes en lista de espera quirúrgica en 2017, con una tasa de 10,46 pacientes por cada 1.000 habitantes --por debajo de la media de 13,13-- y reduce un 8,3 por ciento quienes esperan más de seis meses.

Así se desprende de los datos del Ministerio de Sanidad correspondientes al pasado ejercicio, que permite una comparación de los datos con otras comunidades en lo que se refiere a espera quirúrgica, que ya dio a conocer la Consejería en enero (la lista bajó un 13,1 por ciento, hasta 24.495 personas, con una demora media de 78 días, 29 menos que el año anterior) y aporta cifras sobre la situación de la espera en consultas y pruebas diagnósticas.

En cuanto a las listas de espera quirúrgicas, además de los datos ya conocidos de la Comunidad presentados en enero, los del Ministerio reflejan que Castilla y León cuenta con una tasa de 10,46 pacientes por cada 1.000 habitantes en lista de espera, la quinta menor tasa y por debajo de la media, que se sitúa en 13,3.

Por lo que se refiere a los pacientes con más de seis meses de espera, se ha reducido de un 17,6 por ciento en diciembre de 2016 a 9,3 en 2017 y se sitúa muy por debajo del 17 por ciento de media, la novena en esta materia. El tiempo medio de espera de los pacientes es de 78 días frente a los 106 del conjunto del Sistema --se sitúa en octavo lugar--.

En cuanto a las listas de espera de consultas de especialistas y pruebas diagnósticas, según los datos del Ministerio la tasa de pacientes por 1.000 habitantes que esperan una consulta es de 57,01 (frente al 45,87 de media), la séptima con mayor tasa.

Asimismo, Castilla y León es la tercera con mayor porcentaje de pacientes que esperan más de 60 días, un 74,1 por ciento, lejos del 44,3 por ciento en el conjunto del país y un tiempo medio de espera de 70 días (cuatro por encima de la media). En total, hay 133.438 pacientes pendientes de una primera consulta.

Congruencia en los datos 

A este respecto, el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, ya explicó durante la presentación de los datos de las listas de espera quirúrgica de la Comunidad en enero que se trabaja en la mejora de los sistemas de información que permitan que los datos de listas de espera de las pruebas diagnósticas y consultas de especialidades sean correctos y "congruentes" porque ahora se contabilizan algunos que no son reales o hay pacientes mal incluidos en las mismas.

A este respecto, y dado que los datos no se presentan en rueda de prensa pero sí se facilitan a los grupos parlamentarios en respuesta a sus preguntas en las Cortes, el titular de Sanidad ha aclarado que hay personas en las listas de espera de consultas que probablemente están mal incluidos, ya que en ocasiones no se aclara en las citas si es primera consulta o una revisión, de manera que por defecto se cuenta como la primera y no es así. Aunque normalmente esto se hace bien, hay un número "no pequeño" que supone que los datos no reflejen la realidad.

Lo mismo ocurre en el caso de las pruebas diagnósticas, en las que ha explicado que ni España ni Castilla y León tienen suficientemente determinados algunos conceptos como cuando se hace una solicitud de TAC abdominal y torácico y si eso debe contabilizarse como una o dos pruebas.

Establecer prioridades 

Por ello, ha indicado que hasta que no se organice adecuadamente el sistema de petición de pruebas, en el que se quieren incluir prioridades, no se harán públicos los datos salvo a petición de los grupos parlamentarios porque considera que hay que tratar de que los datos sean "congruentes" y respondan a la verdadera situación.

De esta forma, ha señalado que primero hay que mejorar el sistema de información, pero también en la relación de Atención Primaria y hospitalaria, ya que hay una importante variabilidad en las derivaciones de centros de salud a los servicios hospitalarios, tanto entre centros como entre facultativos, por lo que se trata de analizar este aspecto mediante la conexión de los dos tipos de atención.

El estudio de esta variabilidad "lleva su tiempo", ha advertido el consejero, dado que son casi 3.000 médicos de familia que derivan a los servicios hospitalarios.