Por esta semana voy a dejar aparcados los grandes temas de la política local, regional, nacional e internacional, y no porque las cosas evolucionen con normalidad, sino precisamente para relajar el ambiente y eso voy a intentar con mis comentarios de hoy sobre la Joven Orquesta de Valladolid (JOSVA ).

Y es que el pasado sábado, la JOSVA, celebró el 20 aniversario de su creación con un concierto muy especial en el Teatro Zorrilla, en el que interpretaron una obra muy original de Antonio Salieri titulada  "XXVI variaciones sinfónicas sobre la folia di Spagna" , compuesta en 1.815, y aprovecharon aquel acto para presentar un interesante libro, que bajo el título La JOSVA a través de sus protagonistas, resume su historia a lo largo de estos 20 años.

Para quienes llenábamos al teatro, obviamente la JOSVA era más que conocida, pero mucho me temo que para una buena parte de la población vallisoletana era, y lamentablemente sigue siendo, una perfecta desconocida que por el nombre vinculan con el mundo de la música... y poco más. Y justamente lo que pretendo es intentar que mis lectores descubran lo que es la JOSVA y se acerquen a disfrutar con ella en una época en que se valoran como músicos importantes a personajes que difícilmente superarían una mínima prueba de solfeo para entrar en un conservatorio a pesar de llenar sus locales de "conciertos".

Nuestra joven orquesta, y digo nuestra porque cualquier vallisoletano puede y debe considerarla como propia, fue creada en septiembre de 2.003 por quien hoy, veinte años después, sigue siendo su director, y confiesa que desde el primer momento creyó firmemente en su idea, aún siendo consciente de la dificultad del camino a recorrer, pero la fuerza de la juventud, (Ernesto nació en diciembre del 85), y el apoyo de amigos y familiares le animaron a seguir adelante con su idea... y aquí está la JOSVA. Quizás cuando Fernando Argenta le regaló a los seis años una batuta, le estaba señalando el camino a seguir. Por cierto, aquella batuta la guarda Ernesto como oro en paño.

Pero veamos quién es el  fundador-director la Joven Orquesta y cuál es la finalidad, el funcionamiento y estructura de la misma y cual ha sido su recorrido en estos 20 años. Ernesto nació en el seno de una conocida familia vallisoletana, estudió en el Colegio de San José y allí dio los primeros pasos en su formación musical. Por cierto, los jesuitas le facilitaron el local para los primeros ensayos, primero en un aula del propio colegio y más tarde en una sala de la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús. Hoy dispone de un local propio, la Sala Salieri,  que además pone a disposición de otras actividades culturales. En paralelo a su formación musical, inició su formación civil cursando la Licenciatura de Derecho en la Universidad Vallisoletana.

Y a lo largo de estos años, fue nombrado director del área de música de la Universidad de La Rioja, obtuvo el doctorado en Humanidades, Artes y Educación Musical en la Universidad de Castilla la Mancha, y varios master en diversas universidades españolas y extranjeras, pronunciándoos conferencias en Panamá, Santiago de Compostela, Viena, Bolivia, Perú, La Habana, Ecuador...

Como compositor tiene más de 25 obras estrenadas, y dirige el programa "Música Maestro Ernesto" en La 7 de RTVCyL. Para gestionar la orquesta creó la Fundación EME y nunca ocultó su devoción por Antonio Salieri. Como pueden vdes. imaginar, Ernesto ha tenido varías ofertas para dirigir distintas orquestas, pero siempre ha preferido continuar al frente de su vieja joven orquesta vallisoletana, lo que es de agradecer. Realmente parece un personaje extraído de otro siglo.

En cuanto a la orquesta, integrada por jóvenes con edad comprendida entre los 13 y los 35 años, no es un "noviciado" para desde allí saltar después a orquestas profesionales, sino más bien un espacio en el que jóvenes con formación musical y deseo de disfrutar de la música, consiguen perfeccionar su formación y disfrutar de su vocación, independientemente de que continúen desarrollando sus estudios civiles o desempeñando su profesión de médico, abogado, arquitecto o maestro de cocina. Ciertamente algunos al terminar en la JOSVA fichan por orquestas profesionales. A día de hoy, son más  de 1.000 los jóvenes que han pasado por nuestra orquesta. En el momento actual está integrada por más de 70 jóvenes. La orquesta, además de en España ha actuado en Viena, el Vaticano, donde fueron recibidos en audiencia privada por el Papa Francisco a quien entregaron el oratorio de Navidad compuesto expresamente para aquel momento, y en la sede de las Naciones Unidas en Ginebra.

Con el tiempo, y para gestionar los aspectos administrativos de la propia orquesta se creó la Fundación EME para las artes y el talento joven, qué además es una fuente de financiación de la propia orquesta, pues al ser declarada de interés público, los integrantes de la Fundación recuperan, vía desgravación fiscal, el 80% de su donación. En pocas palabras, donas 150€ y recuperas 120 a través de la declaración de la renta.

Pues bien, el pasado sábado, para conmemorar el 20 aniversario de la fundación de la orquesta, se celebró un concierto en el Teatro Zorrilla cedido al efecto por la Diputación Provincial, en el que familiares y amigos de los integrantes de la orquesta tuvimos la oportunidad de asistir a una mesa redonda sobre la propia orquesta y al concierto de la obra de Salieri de la que hablaba al principio, y en el que los tres alcaldes que lo hemos sido a lo largo de estos 20 años fuimos obsequiados con una batuta e invitados a dirigir unos compases a la sección de metales distribuida por los palcos del teatro, y en el que nombraron madrina a Gloria Lomana que se estrenó moderando la mesa redonda. El acto resultó bien, salvo el retraso de 20 minutos en su inicio por la incomparecencia de uno de los invitados. Algo habitual en él.

En fin, como veréis hoy me he dedicado a un tema mucho más agradable de lo acostumbrado en esta sección, pero mucho me temo que la próxima semana volveremos a las andadas. Hasta entonces.