Palencia camina con paso firme hacia una transición energética que le permita decir adiós a las centrales térmicas (la histórica de Velilla del Río Carrión fue motor económico de la zona durante 60 años) y apostar por plantas de generación de energía no contaminantes.

El último de los proyectos que cuenta con la Declaración de Impacto Medioambiental favorable ha sido el que Iberdrola planea construir en la localidad de Villalba de Guardo.

Se trata de un nuevo parque fotovoltaico que podrá abastecer de energía 100% limpia a 180.000 familias anuales, es decir, a 30.000 más de las que hay actualmente en toda la provincia.

La compañía que preside Ignacio Galán invertirá 217 millones de euros en en el que será uno de los mayores parques fotovoltaicos de Castilla y León, con una potencia de 350 MW y de más de 630.000 módulos, que evitará la emisión de 85.000 toneladas de CO2 anuales.

La construcción de este gigante fotovoltaico permitirá, además, contar con 850 proveedores industriales locales en períodos de máxima actividad, por lo que el proyecto permitirá dinamizar económicamente toda la zona.

La salmantina Tecinsa se hará cargo de la subestación eléctrica

El compromiso de Iberdrola por la dinamización de las economías de los entornos en los que se ubican sus proyectos, tiene su reflejo en la decisión de que sea la empresa salmantina Tecinsa la que se encargue de la construcción de la subestación eléctrica.

Por su parte, la empresa Made Tower, de Medina del Campo (Valladolid), será la responsable de la infraestructura metálica que precise dicha instalación, además de que prever que sean proveedores regionales y nacionales quienes fabriquen el resto de los diferentes componentes necesarios.

Comienza la construcción de la planta fotovoltaica Virgen de Areños III

Una de las infraestructuras previstas por Iberdrola en Palencia, la planta fotovoltaica de Virgen de Areños III, con una potencia de 50 MW, ya ha empezado a construirse. Está situada en la pedanía de Acera de la Vega, en Villota del Páramo, y se prevé produzca casi 86.000 MWh/año que supondrán cancelar la emisión de cerca de 12.000 toneladas de CO2 anuales.

Cuando esta planta entre en funcionamiento se podrán abastecer de energía 100% renovable 26.300 hogares, para lo cual Iberdrola ha desembolsado 27,5 millones de euros.

Dicha planta contará con 90.000 módulos fotovoltaicos y en los períodos punta permitirá la contratación de 250 profesionales locales. También en esta ocasión la compañía energética española ha decidido que la medinense Made Tower se encargue de la producción de los apoyos metálicos de la planta.

Con estas nuevas plantas Iberdrola continúa haciendo de Castilla y León un destino estratégico para sus inversiones en renovables, donde ya gestiona más de 5.100 MW, lo que le convierte en la comunidad autónoma con más megavatios verdes instalados por la compañía en España.