La amenaza de huelga del sector del transporte en España, también en Castilla y León, sobrevuela en un momento en el que la guerra en Ucrania ha puesto patas arriba la recuperación económica del país.

A más de 2 euros el litro del gasóleo y con una tendencia alcista, los representantes de los transportistas se reunieron ayer para detallar los pasos a seguir para paliar los sobrecostes que están asumiendo por el altísimo precio de los carburantes.

Diana de Oyagüe, presidenta de Agtcyl (Asociación General de Transportistas de Castilla y León), informa a este periódico de que aún no se ha tomado una decisión sobre si secundar la huelga anunciada para el día 14 de marzo por la Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte de Mercancías, dado que somos conscientes de que esto es un problema común y lo último que pretendemos es perjudicar a la sociedad", si bien reconoce que la situación está "al límite".

En este sentido, se ha hablado mucho en los últimos días de un posible desabastecimiento de la cesta de la compra si los transportistas secundaban la huelga. Oyagüe considera que ese extremo "es muy difícil que ocurra".

No hay unanimidad

En la reunión mantenida a última hora de ayer por Agtcyl, "había opiniones dispares". Aproximadamente el 32% de los participantes estaba a favor de parar el transporte pesado mientras que el resto consideraba "que no arreglaría nada en concreto".

Esta asociación, que cuenta con cerca de 280 asociados en Castilla y León, advierte de que "cada vez son más las bajas de profesionales que abandonan esta actividad, con sociedades que se extinguen y se queda sólo una persona al volante del camión como autónomo, porque cada día es menos rentable".

Así, Oyagüe apunta a que llenar de gasóleo de un tráiler de ruta de doble depósito cuesta 2.000 euros a la semana, cuando la facturación media de esta actividad es de 8.000 euros al mes.

Reunión urgente con Pedro Sánchez

Por su parte, el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC) ha reclamado formalmente una reunión urgente con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para adoptar medidas extraordinarias que eviten "La ruina del sector del transporte por carretera y el colapso de la economía". 

El propio CNTC desmiente que su organización haya "convocado ningún paro del transporte ni cree que ésta sea una solución eficaz en la actual coyuntura", si bien exigen a Sánchez "hacer efectivas las medidas recogidas en el Real
Decreto ley 3/2022, de 1 de marzo" para mejorar las condiciones de trabajo de los
conductores y equilibrar las relaciones de los transportistas con sus clientes.

Los representantes de Agtcyl mantendrán de nuevo reuniones hoy y mañana a la espera de ver si hay movimientos por parte del Ejecutivo, que no contempla una bajada en el IVA de los carburantes, y decidir qué decisiones adoptar para hacer frente a esta situación.