David en su explotación de Fresno el Viejo con sus ovejas
David lo deja todo para ser pastor en un pueblo de Valladolid: "Estaba estancado y no me sentía valorado"
El ganadero, de 38 años, dejó su trabajo tras completar una Formación Profesional y ser empleado en una fábrica para dedicarse a la profesión de su padre.
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Fresno el Viejo es un municipio de la provincia de Valladolid que se sitúa a más de 50 minutos en coche de la capital provincial y que, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) cuenta con una población de 836 habitantes.
Allí nació David Garrido Jiménez, un hombre de 38 años que desde muy pequeño aprendió el arte del pastoreo, gracias a la labor de su padre, que también se dedicó a ello.
Él decidió emigrar a Valladolid para estudiar, pero desde hace dos años abrió una explotación ganadera en la localidad vallisoletana que cuenta con 300 ovejas reproductoras de leche.
“Las saco por la mañana a pasear y trabajo todo el día con ellas. El objetivo es poder vivir de este oficio antiguo que mi padre me inculcó desde pequeño”, asegura en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León.
David con una de sus ovejas
Un joven “trabajador”
“Soy un chico trabajador, siempre me comprometo con lo que hago y empiezo. Me gusta hacerlo bien. En ocasiones me considero una persona muy cabezota pero también soy gracioso y alegre”, asegura David Garrido Jiménez en declaraciones a este periódico.
Nuestro entrevistado nace en Fresno el Viejo y vive allí hasta los 21 cuando marcha a Valladolid para estudiar un Grado Medio de Fabricación Madera y Mueble y empieza a trabajar en una empresa de carpintería en la que pasa varios años.
“Recuerdo mi infancia de forma feliz, en mi pueblo, yendo al colegio y jugando con los amigos, mayoritariamente al fútbol. Pasábamos el día en la Vega, todos juntos. Era muy bonito. De ahí que de pequeño quisiera ser futbolista”, añade este amante de los viajes y de disfrutar de su familia.
Sin embargo, ni el fútbol ni ese trabajo en la empresa de carpintería serían definitivos en su vida porque dio un cambio radical hace poco tiempo.
De una empresa a ser pastor
“Trabajaba de peón de almacén en una empresa de Valladolid y también como extra en un restaurante para distintos festejos, pero decidí cambiar de profesión después de ver a mi padre en el pasado”, añade.
Su padre era pastor en Fresno el Viejo. Contaba con unas 300 ovejas. Sin embargo, allá por el año 2019 se jubiló, cosa de la edad, y las vendió después de años de mucho esfuerzo y sacrificio.
“Yo estaba estancado en mi trabajo y no me sentía valorado. Fue en el año 2022 cuando comencé con los trámites para hacerme joven ganadero. Tras varios meses de papeleos, obras y demás, compré ovejas. Eran propias, no las que dejó mi padre y empecé por mi cuenta en el verano de 2023”, explica.
Lleva ya como pastor un total de dos “duros años”. Asegura que por “ser joven ganadero” debe “cumplir estrictamente con todo lo que se pide” para “obtener ayudas” pero que “lucha día a día por cumplir el sueño de sacar su labor adelante”.
La explotación ganadera de David
Tiene una gran experiencia porque ya, desde pequeño, fue muy consciente de la labor que llevaban a cabo tanto su padre como su abuelo, que también era pastor.
Un amante de su pueblo y del mundo rural
La jornada laboral de David comienza muy pronto para cuidar a sus ovejas en Fresno el Viejo y darles el mejor trato posible para rentabilizar su cuidado. Cuenta con 300 ovejas que son “reproductoras de leche”. Vende la misma a Entrepinares a través de la Cooperativa de Unión de Campesinos.
“Fresno el Viejo es el lugar que me vio crecer y me dio las bases de mi trabajo como ganadero, ayudando a mi padre desde la adolescencia”, señala. En la actualidad vive en Valladolid porque consiguió formar una familia con su mujer y dos hijos de cuatro y cinco años.
“Voy y vengo todos los días a mi explotación en Fresno el Viejo. Espero que esto que he empezado dé sus frutos porque he puesto todo mi empeño y dedicación para que podamos vivir dignamente gracias a mis ovejas, tanto yo, como mi familia”, añade nuestro entrevistado.
Si todo va bien, su idea es ampliar la explotación y ampliar el número de ovejas, introducir más maquinaria, hacer una nueva distribución de la nave e incluso crear puestos de trabajo para más personas.
Con su esfuerzo y dedicación seguro que lo consigue.