Opinión

Tradiciones: la matanza

Un puñado de cerdos ibéricos pastando por la dehesa.

Un puñado de cerdos ibéricos pastando por la dehesa.

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En estos días de noviembre pasada ya la fiesta de San Martín, en muchísimos pueblos de España se hacía la matanza del cerdo. En la posguerra dependía mucha gente para sobrevivir del grito desesperado del cerdo. Era vital para la alimentación de las familias, era como la despensa de las casas para todo el año que  quedaba por venir. Los cerdos eran criados o se compraban para este ritual, había dos razas la del país o el denominado York, precedente del Reino Unido.

Muchos eran los utensilios que se empleaban para hacer la matanza: una mesa de madera gruesa, un caldero, varios cuchillos muy afilados, una polea y una porra. El primer paso era dar un contundente golpe en la cabeza del cerdo para atontarlo; después se le introducía el cuchillo en la papada con mucho cuidado de no tocar el corazón, pués si se le tocaba moriría rápidamente y no se obtendría la sangre suficiente. El tercer paso sería recoger la sangre en un barreño al efecto para que seguidamente los chamuscadores le limpiaran la piel.

Se le abría en canal para sacar toda la asadura; pulmones, corazón, bazo, hígado etc. Los llamados estazadores obtenían las partes más definidas :cabeza, lomos, panceta, codillo y otros órganos vitales.

El ritual terminaba con el salado, el adobo, el picadillo para terminar con el sazonado. Después haber terminado con este rico manjar era costumbre dar a los vecinos lo que se llamaba la propuesta, que consistía en dar una morcilla, una tajada y un hueso para el caldo. Otras características tenía el gorrín; la grasa derretida en vinagre y lavada varias veces era muy buena para aliviar el dolor de las quemaduras. Y los pulmones del cerdo cocidos y tomados antes de beber alcohol, quitaban una buena borrachera, el tuétano sirve para quitar el dolor de muelas.

Acabaré esta pequeña crónica con unos versos dedicados a la matanza: "Hubo seis cosas en la boda de Antón: cerdo, cochino, puerco, marrano, guarro y lechón". La verdad es que del cerdo se aprovecha todo. Bendito sea.