
Mar Vaquero participa por videoconferencia en el Consejo Interterritorial de Internacionalización
Aragón echa en falta medidas fiscales en el plan antiaranceles de Sánchez: “Nos lo demandan las empresas”
La vicepresidenta Mar Vaquero lamenta que el ministro Cuerpo no haya incluido incentivos fiscales o una mirada a los posibles efectos secundarios en mercados europeos.
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El ministro Carlos Cuerpo ha reunido este lunes a las comunidades autónomas para avanzar en el diseño de una estrategia que aminore el impacto de los aranceles de Trump en las empresas, pero no ha dejado muy convencido a las autonomías. Desde Aragón se ha echado en falta más concreción en las propuestas y apostar por medidas fiscales que acompañen a las distintas industrias a sobrellevar la posible crisis que puede generar una caída a largo plazo de las ventas en Estados Unidos.
Así lo ha trasladado la vicepresidenta y consejera de Economía, Mar Vaquero, a la finalización del encuentro, sintiendo que se ha perdido una oportunidad para incidir en posibles incentivos fiscales para aquellas empresas que invierten en internacionalización o innovación. Entre ellas, desde Aragón proponen una reducción de cuotas en las cotizaciones a la Seguridad Social o una simplificación de trámites administrativos que faciliten el día a día de las organizaciones.
Además, la consejera aragonesa también lamenta que no haya habido más medidas concretas y un “mayor compromiso” sobre las intenciones a corto plazo por parte del Gobierno de España. “Todavía están a tiempo de tomar medidas fiscales que refuercen la competitividad de las empresas aragonesas, incluso también una mayor vigilancia aduanera para valorar si las empresas aragonesas pueden sufrir esa pérdida de competitividad”, ha señalado Vaquero.
Sí se han tenido en cuenta otras propuestas planteadas desde el Gobierno aragonés, como promover la monitorización, acompañamiento y asesoramiento a las empresas hacia posibles nuevos mercados alternativos, así como la promoción de las marcas propias del territorio.
No en vano, y aunque el peso de Estados Unidos en las exportaciones aragonesas apenas representa un 1,4%, con 235 millones de euros, la preocupación se centra en el posible efecto rebote que puedan llegar en países más importantes como Alemania, Francia, Reino Unido e Italia. "Un impacto de las barreras arancelarias en estos mercados tendría también una clara repercusión en las relaciones comerciales de las empresas aragonesas. Por eso hemos dicho que hay que ampliar el marco de acción y tener en cuenta también esa repercusión”, ha apuntado.
Igualmente, también preocupa el impacto que puedan sufrir no ya las exportaciones, sino las inversiones que las propias empresas tengan proyectadas en Estados Unidos. “Hay empresas aragonesas que puedan estar cuestionando o teniendo mayores dificultades las inversiones que tenían planificadas en Estados Unidos, por lo que creemos que también hay que tenerlo en cuenta a la hora de establecer ayudas y medidas”, ha añadido.
Ante ello, desde el Pignatelli no se van a quedar de brazos cruzados y van a planificar una reunión del Consejo de Internacionalización, sin convocar desde hace diez años, donde están presentes las instituciones más representativas del tejido empresarial y social.
Además, van a seguir sobre la mesa algunas de las medidas ya iniciadas en cuanto se conocieron las intenciones de Trump de imponer aranceles a toda la Unión Europea, como una línea de financiación de un millón de euros por parte de la entidad pública Sodiar, que, hasta ahora, no ha recibido solicitudes. “Es cierto que en un primer momento puede no haber habido ese impacto en las ventas, pero conforme avancen los meses es verdad que pueden empezar a notar ese descenso en sus operaciones”, ha incidido Vaquero.