Cada vez son más las personas que miran los ingredientes de un producto o escanean su código de barras con una aplicación antes de añadirlo a la cesta de la compra para comprobar su valor nutricional. Quién más y quién menos ha escuchado alguna vez términos como 'light', 'orgánico', 'eco' y 'bio', etiquetas que acompañan al packaging de todas las marcas, pero que no todo el mundo sabría definir.

La ONG Oxfam Intermón define la alimentación ecológica como aquella basada en "ingredientes que han sido cultivados o elaborados siguiendo un método de producción que integra varios elementos esenciales". Entre ellos: "el empleo de procedimientos y técnicas naturales, el respeto hacia los animales, la preservación del medioambiente y la protección de la salud". Y que por supuesto deja fuera a todos aquellos componentes químicos y organismos genéticamente modificados.

Según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el gasto de los consumidores españoles en productos ecológicos alcanzó en el año 2020 los 2.528 millones de euros, suponiendo un crecimiento del 7 % respecto al año anterior. Los productos vegetales ecológicos más consumidos en España fueron las frutas frescas (15,5%), así como las carnes y derivados cárnicos (15%) en lo que se refiere a productos ecológicos de origen animal. 

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Si alguien sabe sobre alimentación ecológica es Pepe Navarro, el actual director general de Herbolario Navarro, una empresa valenciana con más de 250 años de historia. Con más de una decena de categorías diferentes dentro del apartado de alimentación, entre un 95 y un 99 por ciento de los productos que tienen en stock son de tipo ecológico.

Pepe Navarro no está del todo de acuerdo con que alimentarse a base de productos ecológicos sea la moda alimentaria del momento porque como él explica: "Llevo escuchando que lo ecológico está de moda desde que era pequeño. Lo que ocurre ahora es que la gente ahora está más interesada en su salud. Se cuida más y lee los ingredientes de cada producto". 

Imagen de archivo de una mujer haciendo la compra.

Aunque llenar el carrito de la compra con alimentos ecológicos es algo más caro que hacerlo de alimentos más procesados y con más carga de grasa y azúcares, el gerente del Herbolario Navarro no cree que sus clientes tengan un nivel económico más elevado que el resto, sino que " están más concienciados con la salud y el cuidado del planeta". 

Ventajas de lo ecológico

La alimentación ecológica tiene algunas ventajas, no solo para aquellos que la consumen, sino también para sus productores. En Herbolario Navarro apoyan el comercio justo porque "se respeta el precio de venta tanto del agricultor como del ganadero".

En la mayoría de los casos cuentan con productores locales para trabajar con productos de kilómetro cero. Por otro lado, también tienen en cuenta la estacionalidad de los productos para "ganar en salud" y para que los alimentos "no vengan desde la otra parte del mundo", explica el valenciano. 

Por último, Navarro hace hincapié en la importancia de saber reconocerlos a través de un símbolo identificativo, el logotipo de la Unión Europea (UE) que aparece en el envase del producto, así como el código numérico dela entidad de control de quien depende el operador responsable del producto. Algo así como la forma de una hoja en verde y blanco, con las estrellas que representan los estados miembros de la UE.

Sobre Herbolario Navarro

Herbolario Navarro abrió sus puertas en el corazón de Valencia allá por el año 1771. En aquella época, era solo una tienda que se dedicaba al comercio de plantas medicinales. Ahora, 250 años después están a punto de abrir la tienda número 50.

Madrid, Valencia, Alicante, Albacete, Cantabria, País Vasco, Mallorca, Cuenca, Murcia, Barcelona, son algunas de las ciudades en las que se puede adquirir sus productos, que también están disponibles de forma online. "Hemos ido evolucionando, pero sin perder nuestras raíces. Ahora somos una mezcla de herbolario y tienda ecológica a la vez", concluye.