Las Cortes Valencianas han vivido esta mañana una de las sesiones más esperpénticas de los últimos tiempos en el cruce de acusaciones entre la consellera de Sanidad, Ana Barceló (PSPV) y el diputado popular José Juan Zaplana. La titular de Sanidad ha llegado a llamar al diputado "comisionista" y a negar todas las recriminaciones que los profesionales del departamento de salud le están haciendo desde la reversión del pasado 15 de octubre.

El responsable del área del PP ha pedido explicaciones a la consellera sobre sus planes para que la asistencia sanitaria en la mitad de la comarca de la Vega Baja no se termine convirtiendo este verano en un "infierno sanitario, laboral y asistencial" como el que se ha vivido en Semana Santa.

Se refería a la situación de todos los servicios, pero en especial a los de Urgencias, que habían denunciado sindicatos como CCOO. Hasta 62 horas de espera para los pacientes, que en una segunda intervención la consellera ha negado tajantemente, pero sin más datos que la palabra del dimitido jefe de Servicio.

Esta misma mañana, el comité de Empresa y la Junta de Personal han enviado una misiva a la Conselleria en la que "ponen en su conocimiento que como consecuencia del déficit de facultativos en el Servicio de Urgencias de nuestro hospital durante el día de mañana sábado 23 sólo habrá dos facultativos en el servicio de urgencias para hacerse cargo de la sala de observación con 34 camas, de pacientes graves y pendientes de ingreso, así como todas las urgencias de cualquier especialidad, incluidas las pediátricas

"Consideramos que esta situación es de grave riesgo extremo, para la calidad debida en asistencia a las urgencias", señalaban exigiendo medidas inmediatas y declinando "la responsabilidad de las deficiencias que se pudieran producir en la atención urgente a los ciudadanos en estas condiciones ajenas a nuestra responsabilidad".

"Comisionista"

Zaplana ha expuesto a la consellera todas las graves deficiencias en el departamento de salud, con multitud de servicios privatizados, decisiones improvisadas e incapacidad en la gestión. Para exigir a Barceló que sea "menos autocomplaciente y más autocrítica".

Ha sido entonces cuando en su turno, Barceló ha arremetido contra la anterior concesionaria del departamento, Ribera Salud, acusándole de 200 despidos por no renovar a profesionales (desde la empresa han demostrado que sanidad no les dio autorización para las renovaciones), y de trasladar al Vinalopó equipos médicos compartidos. Ha sido ahí cuando ha acusado a Zaplana de "comisionista".

En su segunda intervención, Zaplana le ha exigido que retirase el insulto y le ha recordado que él le estaba hablando de la situación actual, no de la pasada. En ese momento, la consellera ha utilizado su turno para hablar de todas las enfermeras, auxiliares, celadores y administrativos que se han contratado. Ni una palabra sobre los médicos.

Y es que desde los sindicatos recuerdan que si sólo hay dos médicos por turno en Urgencias, sólo se puede ir atendiendo pacientes de dos en dos, independientemente de enfermeras o administrativos.

Respecto a los datos asistenciales, nuevamente Barceló ha comparado el departamento con cifras del primer trimestre de 2021, cuando la pandemia de Covid vivía sus mayores restricciones. Algo que no ha satisfecho las preguntas de la oposición.