Como ocurriera en la pasada Nochevieja, de nuevo, efectivos de la Guardia Civil y de la Policía Local de El Campello se han movilizado de forma conjunta para evitar que se celebre, mañana sábado, una macrofiesta en las instalaciones del Fun West, convocada a través de redes sociales.             

El alcalde de la localidad alicantina, Juanjo Berenguer, y el concejal de Seguridad, Rafa Galvañ, ambos del Partido Popular, han celebrado este viernes una reunión con los mandos de ambos cuerpos de seguridad, en la que se ha determinado activar un dispositivo similar al que funcionó la pasada Nochevieja, cuando se consiguió abortar el evento gracias a los agentes que impedían el paso a las personas que se acercaban a este emplazamiento, cuyo decorado recuerda al Oeste norteamericano.

El operativo incluye, desde hoy viernes, control policial en todos los accesos al recinto, vallado de las entradas -como se puede ver en la imagen-, movilización de la unidad canina e identificación de los que intenten acceder. Las autoridades ya se han puesto en contacto con los propietarios, a los que han advertido de que no disponen de autorizaciones para la fiesta, que por tanto no se puede celebrar.

El dispositivo incluye un vallado, como ha mostrado el Ayuntamiento de El Campello.

Al parecer, según recoge Radio Alicante que alude a fuentes municipales, el recinto no tiene licencia de apertura ni de ocupación, mientras que, por su parte, el organizador del evento asegura que ha remitido todos los papeles necesarios y está tratando de hablar con los responsables del Ayuntamiento alicantino para que pueda tener lugar la fiesta.

Inspecciones en establecimientos

En otro orden de cosas, agentes de la Policía Nacional de la localidad de Denia han llevado a cabo varios controles en establecimientos de hostelería y alimentación, inspeccionando diez locales en los que se han realizado más de 20 actas y detenido a dos personas por estancia irregular.

Desde la Comisaría de Denia se realizó un dispositivo policial en el que se inspeccionaron distintos establecimientos de hostelería y alimentación de la localidad, tras diversas quejas vecinales en las que manifestaban que en dichos locales se estaba consintiendo por parte de los dueños el consumo de sustancias estupefacientes así como diversas irregularidades en cuestiones de contratos laborales.

Los agentes inspeccionaron un total de diez locales de hostelería y alimentación en el que se levantaron distintas infracciones administrativas, entre ellas, por tener a trabajadores en situación irregular, consumo de sustancias estupefacientes, incumplimiento de medidas sanitarias, así como por no cumplir la legislación tanto municipal como de la Generalitat en materia de licencia de actividad. A su vez fueron detenidas dos personas por estancia irregular en nuestro país.

El dispositivo también contó con la colaboración de la Unidad de Guías Caninos de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Comisaría Provincial de Alicante especialistas en detección de sustancias estupefacientes y con la Policía Local de Denia, además se requirió el apoyo de Inspectores de trabajo.