Playa de San Juan, Alicante. Shutterstock.
Aemet lo confirma: los termómetros podrían alcanzar los 40 grados durante los últimos días de mayo
El calor extremo afectará a buena parte del país y dejará temperaturas impropias de esta época en la provincia de Alicante.
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Sí, es oficial: la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé que los termómetros puedan alcanzar los 40 grados durante los últimos días de mayo en algunas zonas del país. El episodio, que comienza a intensificarse este lunes, tendrá su punto álgido entre el jueves 29 y el viernes 30, cuando se podrían registrar hasta 42 ºC en el valle del Guadalquivir.
Aunque la provincia de Alicante no estará en el epicentro de esta ola de calor anticipada, también experimentará temperaturas propias del verano.
Este calor llega tras una primavera caprichosa y revuelta, especialmente en la Comunitat Valenciana. En Alicante se alternan, casi sin transición, jornadas de lluvias intensas con días de cielo azul y calor estival.
La inestabilidad parece resistirse a abandonar el mes de mayo, que sigue recordando, a golpe de chubascos repentinos o amaneceres frescos, que el verano aún no ha llegado oficialmente, aunque el mercurio diga lo contrario.
Aire africano
Según la Aemet, el responsable de este episodio cálido es un potente anticiclón centrado en Azores, que se extiende sobre la Península y Baleares. Su presencia garantiza cielos despejados, mucha insolación y una atmósfera estable.
A ello se suma, a partir del miércoles, la llegada de una dana entre Canarias y el golfo de Cádiz, que inducirá vientos del sur cargados de aire cálido, seco y con polvo en suspensión de origen africano. El cóctel perfecto para un ascenso térmico generalizado.
El meteorólogo Pedro Gómez, de MeteOrihuela, confirma que esta situación provoca que el calor vaya a más de forma progresiva tanto en las máximas como en las mínimas. En la provincia de Alicante, las zonas de interior podrían rozar los 35 ºC a finales de semana.
"En la orilla del mar como mucho se alcanzarán los 30-31 ºC", matiza Gómez.
Las brisas, aliadas en la costa
El experto subraya el efecto moderador de las brisas marinas, que serán clave para contener el calor junto al litoral. Estas brisas soplarán de mar a tierra a partir del mediodía, impidiendo que las temperaturas se disparen en las zonas costeras.
No obstante, a medida que avanzan hacia el interior, su capacidad para frenar el calor disminuye. "Dependiendo de la hora a la que lleguen, podrá subir más o menos el termómetro", explica Gómez, lo que provocará importantes contrastes térmicos en distancias muy cortas.
¿Primeras noches tropicales?
El calor nocturno también hará acto de presencia. La semana pasada, en la ciudad de Alicante ya se registró la primera noche tropical del año, con una mínima de 20 ºC.
Este fenómeno podría repetirse durante esta semana, sobre todo en puntos cercanos a la costa. Gómez advierte de que este tipo de noches serán cada vez más frecuentes conforme se intensifique el episodio cálido.
Aunque aún hay incertidumbre sobre cuánto durará este golpe de calor prematuro, Aemet señala que a partir del sábado podría aumentar la inestabilidad atmosférica, con más nubes, posibles tormentas y algo de calima. Ingredientes que, sumados, podrían iniciar un leve descenso térmico.
