Uno de los bocadillos XXL que sirven en el Restaurante Cerrillo de San Marcos.
El restaurante de carretera de la A-92 preferido de los camioneros: a tres horas de Alicante y famoso por su increíble jamón
Cuenta con comida típica de la zona, tapas tradicionales y una amplia carta de postres caseros.
Más información: El mítico restaurante de carretera en el que tienes que parar si viajas de Madrid a Alicante
Coger el coche para irse de viaje es, sin duda, una de las mejores sensaciones que uno puede experimentar. Y si se cuenta con buena compañía y la melodía de un buen disco, mejor que mejor.
Un viaje por carretera también implica hacer varias paradas y descubrir las distintas áreas de servicio, en las que es posible encontrarse con personas de todo tipo, con diferentes realidades y destinos.
De todas las paradas que se pueden hacer, dependiendo de la duración y la distancia del viaje, detenerse en un restaurante de carretera es de los momentos más placenteros. Después de horas al volante, entrar en un sitio con olor a café y comida caliente se siente como un respiro.
El ambiente suele ser ruidoso, con camioneros conversando en la barra y el sonido de los cubiertos chocando contra los platos. La carta no suele ser complicada: platos caseros, una sopa caliente, un filete con papas fritas o una tarta de manzana recién hecha. No es comida de lujo, pero es reconfortante.
Sentarse a la mesa permite estirar las piernas y soltar la tensión del viaje. Durante un rato, el mundo se reduce a ese espacio acogedor, lejos del cansancio del trayecto.
Una parada tras la cual toca seguir, pero con el estómago lleno y un poco más de energía.
Si vienes a Alicante desde Andalucía y pasas por Granada, no te puedes perder este restaurante de carretera.
Restaurante Cerrillo de San Marcos
Ubicado en la salida 276 de la A-92, en Diezma, en dirección Murcia-Alicante, este restaurante ofrece una carta muy variada con platos tradicionales de la zona, además de contar con un jamón "exquisito", según relatan sus clientes.
Desde bocadillos XXL hasta tapas de todo tipo y postres caseros, aquí encontrarás todo tipo de comida para darte ese empujón de energía necesario para el resto del viaje.
Además, cuenta con un menú de 13,5 euros que incluye entrante, plato principal, postre y café.
Una parada obligatoria para recargar pilas y relajarse durante unos minutos, disfrutando de su exquisita cocina y del trato inmejorable de sus camareros, siempre dispuestos a regalar su mejor sonrisa a los clientes.
Si tras esta parada tu destino es Alicante, te quedarán unas tres horas de trayecto, que se hacen más amenas con la barriga llena y una compañía que convierte el viaje en la verdadera aventura, más allá del destino final.
