Trasvase del Tajo al Segura. Imagen de archivo
Elche carga contra las nuevas reglas de explotación del Trasvase Tajo-Segura: "Pondría en riesgo nuestra agricultura"
El ayuntamiento solicitará formalmente al Gobierno central la conservación del actual sistema de explotación del trasvase.
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El Ayuntamiento de Elche, encabezado por el alcalde Pablo Ruz, ha presentado una propuesta formal al Pleno para exigir al Gobierno de España que mantenga las actuales reglas de explotación del Trasvase Tajo-Segura.
La iniciativa llega tras conocerse, el pasado 29 de abril, la propuesta de la Comisión de Explotación del Ministerio para la Transición Ecológica de modificar el sistema de gestión de este recurso vital para el sureste peninsular.
Según un comunicado del consistorio ilicitano, al cual ha tenido acceso EL ESPAÑOL, los cambios planteados suponen un duro golpe para la provincia de Alicante, y particularmente para su agricultura, uno de los sectores estratégicos de la economía local.
Las nuevas normas derivan del Real Decreto 35/2023, que elevó los caudales ecológicos del río Tajo y, como consecuencia, restringe notablemente la cantidad de agua trasvasada hacia el Segura.
En concreto, se propone elevar el umbral mínimo de los embalses de cabecera del Tajo de los actuales 1.300 hectómetros cúbicos a 1.600, lo que en la práctica reduce el volumen mensual de agua trasvasable de 60 a 24 hectómetros cúbicos incluso en periodos de abundancia. En escenarios de sequía, el recorte sería aún más drástico: de los 12,5 hm³ actuales se pasaría a tan solo 1,5 hm³, una disminución cercana al 90%.
Desde el Ayuntamiento se considera que esta medida compromete la viabilidad del trasvase, ya que "los costes de mantenimiento no se justificarían con volúmenes tan reducidos". Además, se denuncia la falta de consenso con los territorios afectados y, especialmente, con los regantes y agricultores, principales damnificados de la reforma.
“Elche no puede permanecer en silencio ante una decisión que pone en riesgo su futuro agrícola y económico”, ha señalado el alcalde Pablo Ruz. Por ello, el Ayuntamiento solicitará formalmente al Gobierno central la conservación del actual sistema de explotación del trasvase, defendiendo la necesidad de garantizar un equilibrio entre los intereses ecológicos y las necesidades de las regiones receptoras del agua.
El acuerdo será trasladado al Ministerio para la Transición Ecológica y a todos los grupos parlamentarios del Congreso y el Senado.
