Día de fiesta para el balonmano alicantino, que revivirá este sábado (19:00 horas) una jornada que evocará los mejores tiempos de este deporte en la capital alicantina. No hay mejor partido posible en una ciudad tan balonmanera como Alicante para cerrar el año.

La Fundación Agustinos y el EÓN Horneo Alicante, separados sólo por dos puntos en la clasificación, colisionan en un encuentro mucho más grande que la categoría en la que se enmarca, la División de Honor Plata, por su trascendencia deportiva y social.

El derbi alicantino tiene de todo. Desde jugadores y técnicos con pasado en los dos clubes, comenzando por Fernando Latorre, actual técnico del EÓN Horneo Alicante, exalumno, jugador y entrenador de Agustinos, hasta cierta dosis de rivalidad y revancha, ya que el conjunto colegial sorprendió en la pretemporada a su rival con dos victorias contundentes (26-32 y 19-16), la primera de ellas en la presentación de su rival ante su afición.

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Los dos equipos, tras un trazado irregular durante el curso, llegan a la gran cita del año en un buen momento. La Fundación Agustinos, recién ascendido, viene de encadenar dos victorias seguidas y con la opción real de meter tierra de por medio con la zona de descenso e instalarse en la zona media alta.

El grupo de Alejandro Carrillo, que cuenta con varios ex del EÓN, como Didac Villar o Juande Linares, no tiene tanta presión deportiva, mediática o social como su rival, pero una victoria ante el rival ciudadano sería el mejor colofón posible en La Catedral, que registrará el lleno en sus gradas, a un año excelente. Además, es su guarida se sienten seguros, ya que han logrado como locales cuatro de sus seis triunfos.

El duelo de este sábado, 16 de diciembre, será el primero en la categoría entre dos equipos que persiguen llenar el enorme hueco que dejó en la memoria colectiva alicantina el legendario Calpisa. Los precedentes datan de la pasada pretemporada, en la que el conjunto de Carrillo ganó bien, contra pronóstico, al EÓN Horneo Alicante en los dos cara a cara, uno en la pista de cada equipo.

"No somos el mismo equipo, en aquel momento nosotros estábamos en formación y no jugamos de la misma manera. Ahora somos más compactos y enteros", aclara Fernando Latorre, criado personalmente y profesionalmente en Agustinos, como su lateral y gran cañonero, el alicantino David Jiménez.

Tampoco la clasificación supone una referencia válida para el entrenador alicantino, que considera que los dos puntos de ventaja del EÓN Horneo Alicante no son una garantía de nada en este tipo de partidos.

"En un derbi donde se igualan las fuerzas y ni los puntos ni las rachas importan demasiado. Ellos son un buen equipo y para nosotros sería importante ganar para seguir escalando en la tabla", añade Latorre, quien confió en disputar un derbi "bonito e igualado" para que todos los aficionados disfruten del espectáculo. Pase lo que pase en la pista, el ganador será el balonmano de la ciudad.