Dos finales posibles para decidir cuál debe ser la relación entre la naturaleza y el ser humano. Ese es el dilema que plantea La Fura del Baus en Pastoral por la Tierra, el espectáculo que llega al ADDA Alicante los días 20 y 21 de diciembre. Josep Vicent, que dirigirá la ADDA Simfònica en esta nueva colaboración con la compañía catalana, tiene clara su opción, el pesimismo.

"En la vida escojo el optimismo, pero en la relación del hombre con la naturaleza, creo que hemos pasado un punto sin retorno", cuenta en un descanso durante el fin de semana de su estudio de las partituras que tiene que preparar para este montaje que parte de la sinfonía número 6 de Beethoven, la conocida como Pastoral, para hacer un recorrido por su música y la de otros compositores.

"En este montaje, me gusta decir que hay un guion musical que recorre Beethoven", explica sobre esta obra con dirección escénica de Carlus Padrissa. La reflexión sobre el futuro del planeta parte de la sexta sinfonía "porque representa como ninguna otra obra un reflejo de la fuerza de la naturaleza, un reflejo de su fuerza en el ser humano y en nuestra vida".

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En este camino que proponen pasarán por el adagio de la séptima sinfonía o el único ballet que compuso el alemán, Las criaturas de Prometeo. Y como los espectadores tendrán que votar por el final que prefieran a través de la aplicación Kalliope, se interpretarán unas piezas u otras.

En uno de esos caminos que muestran el destino de la Tierra, avanza Josep Vicent, estará la apertura Egmont y las partituras de Carl Maria von Weber para Oberon. Y en este "amplio guion sonoro donde el centro es la Pastoral, hay otros momentos como Antonin Reicha, Julius Rietz, la cavatina de Weber o el Hero und Leander de Fanny Mendelssohn-Hensel, en el que colabora la magnífica soprano Sophie Karthäuser". Obras de compositores sinfónicos que pasarán por el escenario junto a música africana o ucraniana o una jota popular.

La responsabilidad del espectador, como en la vida misma, será la que se imponga en este tema. Y lo harán con uno de los grandes enemigos de los auditorios y teatros, el móvil. Una decisión escénica con la que se muestra risueño Josep Vicent y que celebra en este caso. Con este sistema, reitera, a través de sus móviles "podrán decidir si el espectáculo de Pastoral por la Tierra acaba triunfalmente o como una tempestad, el optimismo o el pesimismo".

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En cualquier caso, un camino u otro estará acompañado de una gran escenografía en la que se usarán proyecciones manejadas por ordenador, vídeo, danza y también habrá voces. "Me gusta porque es muy refinado, muy furero, lleno de influencias y rítmica teatral", afirma el director que trabaja habitualmente con la compañía.

Todo el esfuerzo que supone levantar un montaje como este no le pesa al director alicantino, "El que se viene arriba es el pueblo alicantino porque hago un examen continuo del deseo y de la interacción", reflexiona sobre esta propuesta con la que ofrece de nuevo al público la escena que no se espera en un auditorio de conciertos. Josep Vicent, que se define como "un hombre de escena", asegura que "disfruta viendo que la música es parte de un espectáculo total".

La primera ópera de producción propia que lanzaba el año pasado, Carmen, ya era una culminación de diferentes propuestas que habían pasado por el auditorio de Campoamor. Esta temporada retomarán de nuevo la experiencia con La Bohème. "Y lo que es cierto es que solo queremos trabajar con los mejores, y La Fura dels Baus es un referente que ha hecho historia y que pasará a la historia, por eso esta es la tercera producción tras Carmina Burana y La Creación", concluye.