El futuro de la escena se presenta en cada Trobada de Teatre Jove. Alicante abre este encuentro dedicado a formar espectadores y creadores adolescentes para mostrarles lo que significa el salto a lo profesional. Las Cigarreras acoge hasta el jueves la primera fase de este programa con una apuesta por lo emocional y comprometido.

Ambos adjetivos cuadran en Ernesto Martín. Él es el coordinador en la provincia de este proyecto autonómico que impulsan Projecte inestable y el Institut Valencià de la Joventut (IVAJ). Y cuando habla de lo que supone el regreso a un encuentro presencial en el que los alumnos comparten espacio y pueden ocupar las plateas pone ese extra de entusiasmo de quien disfruta de su trabajo.

Con ese sentimiento ha vivido este arranque de semana con un centenar de jóvenes entre 12 y 17 años ocupando Las Cigarreras y su Caja Negra. "Hemos vuelto a esa presencialidad y vuelve la magia del directo", indica. La del alumnado que ama las artes escénicas y comparte talleres con los que ven la obra de teatro o están almorzando juntos compartiendo ideas, enumera.

Aunque sigue siendo la mascarilla obligatoria en interiores y el mantener las distancias, en esta novena edición de la Trobada se respira un aire especial. Es quizás el de reconquistar los espacios después de dos ediciones afectadas por la pandemia. En 2020 se sustituyó por una serie de encuentros virtuales que organizó Martín con otros profesores y alumnos para compartir experiencias. Y en 2021 fue el vídeo el que asumió la labor de compartir el formato escénico.

Emoción y compromiso

La pandemia ya se coló en uno de los textos que se presentaron el año pasado, Encerrados (Memorias del confinamiento). Y en esta edición vuelve a aparecer como reflejo inevitable de lo que les sucede a sus autores e intérpretes. Esa idea del espejo en que mirarse este año cobra aún más peso.

"Este año hay cabida a la crítica política", avanza Martín. Además de la pandemia, hablan del acoso escolar, como ha mostrado este lunes SuperCov y Escúchame. Este último texto, llegado desde el instituto Las Fuentes de Villena, está dirigido por el profesor Jordi Gandia. El año pasado ya participaron en Alicante con Esto no es una escalera, un montaje que les llevó a Madrid para la final nacional de los premios Buero Vallejo de teatro joven.

La primera jornada de la Trobada de Teatre Jove ha mostrado las dos caras que representan el arte escénico. De la metáfora casi onírica con que se aborda el hostigamiento al que es diferente en las aulas se pasa a la comedia de superhéroes en pandemia. Unas diferencias que, para Martín, también ejemplifican las que describen el mundo interior de los adolescentes, quienes "siempre tiran al contraste de emociones, no tienden solo a una emoción".

Es fácil identificarse con ello cuando las noticias que se generan estos días tienden a ello. Para el coordinador de las jornadas la obra que cerrará esta primera fase de las tres que se desarrollarán en la Comunidad tiene un inesperado alcance universal. "La obra que se llama Neosainetes Cósmicos va de abandonar la Tierra y de irse a otros planetas y hoy día se carga de otro significado aunque no estaba escrita con esa pretensión", adelanta sobre esta creación del instituto Nuestra Señora del Carmen que dirigen en Elche Nacho Ortuño y Mari Ángeles Ortega.

El cambio

Estos son solo tres de los ocho montajes que pasarán por la Caja Negra. Un escenario al que vuelven y con el Martín celebra que ganan en una demanda, conseguir tener talleres y exhibición en un mismo espacio. La amplitud de Cigarreras, que releva al más reducido Teatre Arniches, les otorga esa ansiada libertad de movimientos. Y eso pese a la lluvia que acompañará estos días. "Teníamos plan A y B por los exteriores e interiores y se ha podido almorzar en el jardín vertical", cuenta risueño, "mañana, ya veremos".