La ausencia de rotondas provoca muchas situaciones de peligro en las intersecciones de Busot.

La ausencia de rotondas provoca muchas situaciones de peligro en las intersecciones de Busot.

Alicante ciudad INVERSIONES

Busot reclama a la Generalitat que acabe la obra de la carretera que prometió en 2008, hace 13 años

La vía es transitada semanalmente por 2.000 ciclistas que deben convivir con residentes y visitantes de las Cuevas de Canelobre, provocando situaciones de peligro.

27 septiembre, 2021 21:43
Alicante

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En el año 2008, el Ayuntamiento de Busot, contrató a instancias de la Conselleria de Infraestructuras de la Generalitat valenciana, el acondicionamiento de la travesía CV-773 a su paso por la localidad. Trece años después sigue sin terminarse la obra. El Ayuntamiento ha exigido al área de Arcadi España su finalización.

En su escrito a la Conselleria, el ayuntamiento le recuerda que llevan años tratando el asunto para que la Generalitat se hiciese cargo de la mejora, conservación y mantenimiento de la vía. Así como de "la ejecución total del mismo al ser la titular de la vía" que pasa por las urbanizaciones de Hoya de los Patos y Bonalba Alta.

También, que en 2015 se ejecutó parte del proyecto con la construcción de una acera en el margen derecho de la carretera, así como la instalación de badenes para ralentizar la velocidad de los vehículos que circulaban por ella.

No obstante, el proyecto sigue sin terminarse en los principales hitos que marcaba la inversión autonómica, quedando pendientes varias actuaciones. 

Entre otras, la construcción de una rotonda o glorieta principal para acceso al municipio alicantino y la construcción de un carril ciclo-peatonal a su paso por el margen derecho en sentido a Busot.

Desde el municipio consideran imprescindible mejorar la seguridad de peatones, ciclistas y conductores que "diariamente transitan y conviven en esta zona".

Ciclistas

El Ayuntamiento de Busot que dirige el popular Alejandro Morant, ha calculado que semanalmente circulan por la vía cerca de 2.000 ciclistas, un dato que se ha incrementado durante la pandemia de Covid-19.

Se da la circunstancia de que pese al elevado número de ciclistas, en los 9 kilómetros que separan el municipio de su vecino Mutxamel, no existe ninguna vía diferenciada para ellos. Por lo que "se dan situaciones muy peligrosas entre ciclistas y conductores que arriesgan y ponen en peligro" la seguridad de los primeros al tratar de adelantar los segundos.

De este modo, el ayuntamiento argumenta que se trata de "una bomba de relojería" en una población turística que cuenta con el emblemático emplazamiento de las Cuevas de Canelobre como uno de sus mayores atractivos, incrementado la circulación en la zona.   

Población

Además, en la zona señalada hay cerca de 500 viviendas y 1.300 residentes que diariamente utilizan la vía para sus desplazamientos. Una circulación que se ve interrumpida con los continuos cambios de sentido y dirección para el acceso a las urbanizaciones, que no cuentan con una rotonda que favorezca las maniobras.

A ello se une la falta de visibilidad en algunas zonas que coinciden con las intersecciones para el acceso a las viviendas de los residentes.