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El intenso ritmo de vida con el que muchas personas viven hoy en día hace necesaria la creación de todo tipo de quedadas con el fin de favorecer las relaciones sociales, que se hacen cada vez más complicadas por la falta de tiempo.

Desde cazar Pokémons hasta hacer croché, cualquier afición vale para reunir a cientos de personas que se conocen e intercambian consejos e impresiones sobre sus hobbies.

Pero las redes sociales son tan increíbles que son capaces de reunir a miles de desconocidos con fines que poco tienen que ver con las aficiones.

Éste es el caso de la quedada que tendrá lugar este jueves a las 19:00 junto a la fuente del Ángel Caído del parque del Retiro, dónde un total de 4.000 usuarios de Facebook ha afirmado que acudirá esta tarde a llorar en grupo. Sí, sí, han leído ustedes bien. A llorar.

El artífice del evento que ha dado lugar a esta original quedada es Fran Soler, un mallorquín que se encuentra en Madrid estudiando un máster en sociología y que decidió lanzar este llamamiento en la red social después de ver que también hoy se celebraría uno similar en Barcelona.

En ningún momento imaginó que tendría una acogida tan grande y se sorprende al comprobar que tanta gente "necesite" quedar para llorar. Pero, ¿por qué lo hacen? ¿Es realmente beneficioso derramar lágrimas más allá del mero hecho de desestresarse? La ciencia tiene respuestas para ello y algunas son muy sorprendentes.

Las lágrimas protegen los ojos

Las lágrimas son un mecanismo más de protección del ojo, que se libera cuando éste sufre algún tipo de lesión.

Esto se debe a que, por un lado, ayudan a lavar y sacar al exterior cualquier cuerpo extraño que haya podido quedar retenido y, por otro, contienen sustancias muy beneficiosas, como la lisozima, cuya acción antibacteriana y antiviral protege contra posibles infecciones, y la glucosa, que mantienen las células del ojo nutridas.

Se refuerza el sistema inmune

Algunos estudios postulan que otra de las funciones de los efectos antimicrobianos de la lisozima puede ser reforzar las defensas, que suelen quedar más o menos deterioradas después de las situaciones de estrés que a menudo conducen al llanto.

Las lágrimas protegen la nariz

El lagrimeo, ya sea por el llanto o por otras causas no sólo es beneficioso para los ojos, sino que también ayuda a limpiar la nariz, ya que las lágrimas viajan hasta allí a través de los conductos nasales, favoreciendo la liberación del moco y evitando la acumulación de agentes infecciosos.

Al fin y al cabo, ¿quién no moquea cuando llora?

Mejora el estado de ánimo y disminuye el estrés

Según un estudio llevado a cabo por científicos de la Universidad de Tilburg, las personas que lloran durante el visionado de películas, sufren un leve empeoramiento inicial de su estado de ánimo, pero éste se refuerza inmediatamente después, de modo que los individuos que lloran finalmente tienen mejor humor que los que no lo hicieron.

Por otro lado, según el bioquímico William H. Frey, que lleva desde los años 80 estudiando la función de las lágrimas,  esta mejora del estado de ánimo se debe también a que el llanto ayuda a eliminar una serie de sustancias que se acumulan en el organismo durante las situaciones estresantes, de modo que disminuyen los efectos perjudiciales que éste puede causar sobre la salud.

De ahí que todo el mundo sienta la necesidad de llorar y gritar cuándo se encuentra muy estresado.

El cuerpo es sabio y si la especie humana ha conservado el llanto evolutivamente es porque tiene muchísimos beneficios de los que a menudo no somos ni siquiera conscientes. Así que, ya saben, si les apetece sentir las saludables consecuencias del llanto, esta tarde hay una cita para ello en el parque del Retiro.