Descubre el truco de Marie Kondo para hacer la maleta perfecta

El verano ya está aquí y con él, las esperadísimas vacaciones. Comienza la temporada de viajes largos y escapadas de fin de semana. Maleta de mano, bolso al hombro y muchas ganas de llegar al destino final es todo lo que necesitamos para pasar unos días de descanso y desconexión.

¿A qué tengo derecho si mi vuelo se retrasa o cancela?

Sin embargo, antes de estar tumbados en la playa o visitando una nueva ciudad, tenemos que pasar por la parte más aburrida de viajar: hacer la maleta. Muchas veces no sabemos cómo hacerla y acabamos metiendo ropa de más que ni necesitamos ni utilizamos.

Para que no tengáis que tiraros horas decidiendo que ropa llevar y peleándoos con la maleta para que cierre, os traemos el método de la organizadora japonesa Marie Kondo, con el que conseguirás una maleta perfecta y no volverás a sufrir preparando el equipaje nunca más.

Cómo hacer la maleta con el truco Marie Kondo

1. Realizar una lista con los imprescindibles

Lo primero que hay que tener en cuenta es el destino elegido y su climatología. ¿Sol y playa o frío y montaña? Basándonos en esto, debemos comenzar a decidir que queremos llevar y hacer una lista con las cosas imprescindibles.

En este paso es fundamental olvidarse de los por si acaso y ser funcional. Si te encuentras indeciso con alguna prenda, colócala en tus manos y pregúntate ‘¿Lo necesito, lo usaré?’. Si tras meditarlo unos segundos la respuesta es afirmativa, entonces, inclúyelo en la lista.

2. Categoriza lo que vas a llevar

Marie Kondo asegura que categorizar los objetos que vas a llevarte ayudará a mantener mayor orden y equilibrio. Es un paso esencial para que quepa perfectamente todo lo que necesitas en tu viaje.

Kondo recomienda separar lo que vas a llevar en cuatro categorías.

1. Ropa y calzado
2. Elementos de cuidado personal
3. Documentación (pasaportes, tarjetas, seguro médico, etc.)
4. Dispositivos electrónicos (ordenador portátil, cámara, cargadores, etc.)

Una vez estén categorizados todos los objetos, coloca en la parte superior aquellos elementos que sean más livianos, de forma que cuando pongas la maleta en posición vertical, el peso mayor se concentre en la parte baja y no en la superior.

3. Haz la maleta la tarde de antes

Según este método, el momento perfecto para hacer la maleta es la tarde anterior al viaje. De esta manera no tendrás que sacar ni añadir más objetos, algo que suele ocurrir cuando preparamos nuestro equipaje con demasiada antelación o, por el contrario, el mismo día.

Con esto también nos aseguramos de tener un tiempo prudente por si necesitamos conseguir a última hora algo que nos haga falta (por ejemplo, artículos de aseo).

4. Dobla la ropa en vertical

Para economizar el espacio y poder meter más cosas en tu maleta es necesario doblar la ropa en vertical. Así conseguimos colocar las prendas en pequeños paquetitos de tres pliegues. Es una forma ideal para doblar camisetas, polos, jerséis finos, vestidos o calcetines.

Con esta técnica ahorras muchísimo espacio en la maleta y además evitarás que la ropa se arrugue durante el viaje.

Lo único que no se debe doblar en vertical son los trajes de chaqueta o la ropa interior, que debe ir colocada en horizontal encima de todos los objetos. Digamos que irían en la “cima” de la maleta.

5. Coloca los accesorios en neceseres

Muchas veces solemos meter las cosas de aseo y los accesorios como pendientes o collares a lo loco o en pequeños bolsillos dentro de la maleta y, a la hora de buscarlos, no los encontramos.

Para que esto no pase y evitar el “caos”, Marie Kondo recomienda colocar estos elementos en neceseres y situarlos en la parte baja de la maleta.

6. Los zapatos siempre en fundas

Para el calzado se recomienza colocarlo en una funda de tela o de plástico antes de introducirlos en la maleta. Más que práctica es una razón higiénica, aunque los zapatos estén limpios, pueden desprender malos olores o arena que se queda en la suela y ensuciar la maleta y parte de tu ropa.

8. Los por si acasos están prohibidos

Lo hemos hecho todos, meter prendas ‘por si acaso’ que al final no acabamos utilizando. Por ejemplo, si viajas a un país nórdico, meter una blusa por si suben las temperaturas y hace calor, o, por el contrario, si vamos a un lugar cálido, meter un jersey gordo por si en algún momento hace un poco más de frío.

Esto entorpece la maleta, ya que esa ropa acaba por no usarse y pierdes espacio. Hay que despejar la mente y ser prácticos. Si viajas a un clima frío, lleva ropa para ese tipo de clima, y si tu destino es de clima caliente y húmedo, lo mismo.

9. Bolso de mano

Por último, Marie Kondo recomienda llevar la documentación importante y los aparatos electrónicos más indispensables en tu bolso de mano. Así, en el caso de que se pierda tu maleta, seguirás teniendo contigo los elementos de más valor.