El camarero ponteareano Martín González.
El ponteareano Martín González: "Un buen camarero reconoce qué tipo de cliente tiene delante"
Este profesional de la hostelería se alzó con la victoria en el concurso organizado por la Federación Empresarial de Turismo y Hostelería de Pontevedra, Feprotur, para elegir al mejor camarero de la provincia
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La Federación Empresarial de Turismo y Hostelería de Pontevedra, Feprotur, celebró este pasado noviembre el primer concurso para elegir al mejor camarero o camarera de la provincia.
Entre las pruebas que desempeñaron los participantes, el jurado encargado de elegir al mejor tuvo que valorar cómo preparaban mesas y comandas, de qué manera servían un vino, preparaban un café o tiraban una caña.
También se valoró la destreza, rapidez, agilidad, atención, técnica y habilidades comunicativas de los concursantes.
Entre ellos destacó un ponteareano, Martín González, que, con 21 años, se alzó con la victoria. A este joven camarero la profesión le vino por tradición: Su familia es la propietaria del Asador Yambo de Ponteareas y de El otro mundo del Tea.
Podría decirse que, desde muy joven, ya sabe lo que es trabajar duro.
(Ríe) Sí, sin duda.
Le vino impuesto o verdaderamente le gustaba la hostelería.
La verdad es que fui yo mismo. Empecé detrás de la barra, como todo el que empieza en esto, y luego me fui soltando con el servicio en sala y también me formé un poco más.
Entiendo que quiere perpetuar el negocio familiar.
Sí, eso es lo que pretendo, la verdad.
¿Siempre tuvo claro que se dedicaría a la hostelería?
Sí, desde que empecé me gustó y decidí estudiar hostelería. Desde entonces ahí sigo, con ella y formándome.
¿Qué es lo que más le gusta de esta profesión?
Creo que el hablar con la gente es lo que más me gusta: Explicarle los productos que utilizamos, los platos que hacemos...
¿Qué es lo que diferencia a un buen camarero?
Pienso que, principalmente, la actitud. El servicio es importante. Creo que se ve a un buen profesional cuando conoce el producto con el que trabaja, su carta, responde correctamente a algo que le preguntan... Te diría que es alguien que sabe elaborar bien un café. Parece algo sencillo, pero hacer bien un café es bastante difícil. Hay que tener una sonrisa en la cara y buenas maneras.
Y esto de la buena cara, ¿cómo se consigue cuando se acumulan las horas y el cansancio?
Pues yo creo que está la clave ahí, ahí es cuando demuestras que eres un buen profesional. Aunque puedas llevar horas trabajando, tengas un mal día o hayas discutido con alguien, el cliente no tiene por qué pagar eso.
De una buena experiencia hostelera, ¿qué porcentaje corresponde a un buen camarero?
Más de un 70%. A ver, cuando eliges un restaurante ya esperas que la comida esté acorde a tu expectativa, pero si ya esto se complementa con un buen servicio, pues es lo mejor.
Y en cuanto a las habilidades concretas de un camarero para desenvolverse en su profesión, ¿cuáles son las más importantes?
Pienso que la rapidez, las buenas formas y ser agradable. También mostrar interés por el cliente y aconsejarle bien.
¿Emplea alguna estrategia mnemotécnica para quedarse con las comandas más complicadas?
Mi estrategia es anotar (ríe de nuevo), así no te olvidas. Es importante estar centrado y organizarse bien, claro. Te puede quedar algo atrás, pero procuramos que esto no pase.
Habla de ser agradable e interesarse por los clientes, ¿pero eso verdaderamente le gusta en exceso al comensal gallego?
Sí, aquí en Galicia quizá tenemos que ser un poco menos invasivos. No nos metemos tanto en el espacio personal del cliente. Al final, un buen camarero tiene que saber llegar a una mesa y reconocer al tipo de cliente que tiene delante.
¿Está poco profesionalizado el sector de la hostelería?
Es verdad que siempre ha habido eso de "no encuentro nada de lo mío, pues me meto a camarero". Pero es que hoy en día, y ya no hablo de grandes restaurantes, esperas que al menos un camarero sepa llevar una bandeja, aunque se trate del bar más pequeño del pueblo más recóndito. Poco a poco también se están mejorando las condiciones laborales, porque si esto no es así, no vas a tener a gente profesional.